Según afirmó el Dr. J.R Walters de la empresa UPB Europe, en una reunión organizada por el grupo de nutrición animal Setna ayer en Barcelona, la Administración de Piensos y Medicamentos Americana (FDA) ha aprobado recientemente el empleo de la Ractopamina como aditivo para piensos. La Ractopamina es un antagonista B-adrenérgico con un tiempo de retirada nulo, lo que hace que pueda emplearse hasta el momento del sacrificio. Esta hormona parece influir de manera favorable en la ganancia diaria media, el índice de conversión y la cantidad de magro en la canal. En la actualidad algunas empresas están llevando a cabo ensayos de crecimiento y canal para confirmar si este aditivo puede emplearse en sus sistemas de producción y ver qué efectos tiene sobre la calidad de la carne de cerdo. Según Walters «queda aún por saber si los distintos genotipos responden de manera diferente a la Ractopamina y tampoco esta claro cual va a ser la reacción del consumidor ante los cerdos producidos empleando este aditivo; aun así los productores europeos se enfrentan a una gran desventaja en un mercado tan competitivo como es el de porcino».
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