El Cabildo de Tenerife informará a los agricultores y ganaderos sobre las nuevas técnicas vinculadas a este sector. Las Agencias de Extensión Agraria distribuídas por toda la Isla serán las encargadas de poner en marcha las 225 actividades formativas programadas para este año. Los programas se realizarán en horario de tarde-noche con el fin de facilitar la asistencia.
El consejero insular de Aguas y Agricultura, Alonso Arroyo, indica que «cada año desde el Cabildo de Tenerife se intenta mejorar la calidad de la oferta formativa, tanto en lo que se refiere a los medios técnicos, como a la calidad del profesorado que está compuesto por técnicos de reconocida experiencia y prestigio. El programa incorpora la experiencia del año anterior, incrementando el número de actividades de corta duración y de carácter eminentemente práctico». «En esta ocasión se ha incluido como novedad el análisis de los nuevos problemas tecnológicos que han aparecido durante el pasado año, como es el caso de la encefalopatía espongiforme bovina o la reconversión del viñedo, entre otros». Durante el año 2000 se contabilizaron más de 3.000 asistentes a este tipo de actividades.
El esquema formativo se clasifica, según sus características, en cursos, cursillos, jornadas, demostraciones y charlas. Los cursos son actividades de larga duración de al menos 20 horas lectivas que se desarrollan durante un mínimo de cinco días. Estos cursos abordan temas que por sus características no pueden desarrollarse en menos tiempo y están destinados a agricultores técnicamente avanzados. Los cursillos tienen una duración entre seis y veinte horas durante tres o cuatro días, mientras que las jornadas van dirigidas a desarrollar aspectos tecnológicos que requieren una demostración práctica de los contenidos teóricos.
Estas se desarrollan a lo largo de dos días; el primer día corresponde a una charla mientras que el segundo corresponde a la demostración. Las demostraciones son eminentemente prácticas en las que se muestra una explotación tipo. La aplicación de una determinada técnica o el funcionamiento de alguna máquina. Se trata en la mayoría de los casos de tecnologías cuya eficacia ha sido probada y sobre la que existe experiencia en la zona. La duración suele ser de tres horas. Por último, las charlas suelen ser la actividad más sencilla de carácter divulgativo que suelen ir seguidas de coloquio o debate.
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