La Asociación de Empresas Productoras de Frutas y Hortalizas y Exportadoras de Andalucía y Extremadura (Asociafruit) indicó que la situación alcanzará «máxima gravedad» si se tiene en cuenta que «una parte muy importante de la superficie sumergida tendrá que ser arrancada por la muerte de los árboles como consecuencia de la asfixia de las raíces».
El sector de la fruta de hueso –melocotón, nectarina y ciruela–, destacó que el «esfuerzo» realizado por el sector productor y comercializador, que ha tenido que apostar por una alta especialización y exigencia en la selección varietal, se ha visto «frustrado de repente» por las inundaciones, que van a originar unas pérdidas «irremediables» a los agricultores y la desaparición de más de 170.000 peonadas para esta campaña.
El sector consideró que a pesar de la importancia de las lluvias sufridas, las previsiones meteorológicas ya anunciaban días antes que éstas se iban a producir, «sin que las entidades gestoras de la cuenca tomaran medidas para prevenir los desembalses que han originado el desbordamiento del río, lo que podía haber evitado, si no el desbordamiento, sí la dimensión de éste».
Ello, a pesar de que, según indicó, una vez se conocieron dichas previsiones, Asociafruit se puso en contacto tanto con la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, y solicitó la mediación de la Consejería de Agricultura de la Junta de Andalucía para que se tomasen medidas, anticipando los desembalses.
Aunque las pérdidas definitivas habrá que valorarlas una vez bajen las aguas, en estos momentos el sector afectado «se enfrenta con impotencia a su futuro», ya que «la replantación conlleva el riesgo de que situaciones como la actual se repitan». Asimismo, apuntó que si no se replantara, se produciría la desaparición «definitiva de 200.000 peonadas anuales».
Por otro lado, Asociafruit destacó también las «importantes» pérdidas acumuladas en las plantaciones de cítricos y patata temprana. En el primero de ellos, detalló que aunque es pronto para evaluar daños, ya se pueden anticipar «graves pérdidas» en la cosecha pendiente de recolectar.
En el caso de la patata, manifestó que se unen la imposibilidad de poder acceder a las fincas para realizar la siembra, con la pudrición de gran parte de lo sembrado antes de las lluvias –en torno a un 35 y 40% de la superficie total prevista–.
En este sentido, explicó que el retraso en la siembra origina el solapamiento de la campaña andaluza con la de otras zonas de producción y dificultades de comercialización de la cosecha.
Asociafruit representa un 90% de la producción y comercialización de la fruta de hueso de la vega del Guadalquivir, un 70% en el caso de los cítricos. En el caso de la patata temprana, Asociafruit representa un 75% de la producción y/o comercialización andaluza y un 95% de la exportación de la patata de nuestra región.
Europa Press