El Consejo de Ministros en su reunión del pasado viernes ha acordado la ampliación de los límites del Parque Nacional de Doñana en 3.531 hectáreas, lo que supone un aumento del 7% de la superficie que tenía hasta ahora este espacio natural protegido, establecida en 50.720 hectáreas.
El Ministerio de Medio Ambiente presentó la propuesta de ampliación en el último pleno del Patronato del Parque Nacional que se reunió el pasado 12 enero bajo la presidencia de Elvira Rodríguez. El Patronato emitió un informe favorable y, una vez finalizada la tramitación administrativa, concluye este proceso que concreta por primera vez un aumento del espacio del Parque Nacional desde que en 1978 se aprueba la Ley de declaración.
Todos los terrenos incluidos son de titularidad del Estado, limítrofes con el Parque Nacional y no existe sobre ellos, actualmente, ningún uso que impida su incorporación a este valioso espacio protegido. El objetivo de la ampliación responde, entre otros, a los siguientes objetivos: resolver disfunciones de los límites para facilitar la gestión; incorporar territorios colindantes en continuidad física y ambiental y que sean valiosos; y proporcionar mayor calidad a los hábitats en donde viven especies en peligro de extinción con el lince ibérico y el águila imperial.
La ampliación incluye tres nuevos territorios. La primera zona es la denominada “Triángulo Oeste”, formado entre el actual Parque Nacional de Doñana y la carretera del Rocío a Matalascañas, con una superficie de 723 hectáreas, y que responde en su forma a esa figura geométrica. En la actualidad, no tiene ninguna figura de protección, pero mantiene una continuidad ambiental total con el Parque Nacional.
Otras 142 hectáreas corresponden a los terrenos públicos estatales de la Plana del Arroyo del Partido, comprendidos entre el Caño Marín y el Arroyo de Cañada Mayor. Están situados entre la Raya Real y el límite actual del Parque y pertenecen al Parque Natural.
La mayor proporción de terreno (2.665 hectáreas) corresponde a la finca “Los Caracoles” que formaba parte del Parque Natural de Doñana y que bordea una gran parte del perímetro del Parque Nacional. Todos los terrenos propuestos aseguran una continuidad ambiental y natural en el parque, son limítrofes a él y están claramente relacionados.
Terrenos propiedad del estado
La mayoría de 3.531 nuevas hectáreas han sido expropiadas por el Ministerio de Medio Ambiente, a través de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, dentro del proyecto Doñana 2005. Además, la finca “Najarsa”, en el Triángulo Oeste, ha sido adquirida por Parques Nacionales, mediante compra voluntaria a sus propietarios durante los últimos años.
De esta zona han quedado excluidas unas pequeñas parcelas privadas, cuya superficie estimada es de 11 hectáreas, si bien se incorporarán al Parque Nacional de forma automática cuando sean adquiridas por la Administración o aportadas para este fin por sus propietarios.
Esta ampliación del Parque Nacional de Doñana es una actuación de singular trascendencia e importancia en el contexto de la conservación de la naturaleza, tanto nacional como internacional. Desde la aprobación de la Ley del Parque Nacional en 1978 no se habían modificado los límites, a pesar de la existencia de un consenso generalizado de que determinadas áreas colindantes debían pasar a formar parte de este espacio protegido.
El Parque Nacional de Doñana fue creado en el año 1969 con una superficie inicial de unas 35.000 hectáreas, que incluía la práctica totalidad del primitivo Coto de Doñana y una parte de las colindantes Marismas del Guadalquivir. Tras su ampliación en 1978, pasó a 50.000 hectáreas, incorporando territorios costeros de dunas, arenales y pinares, más superficie de marismas, y el colindante Coto del Rey al norte de la Marisma del Guadalquivir.
MMA