La superficie afectada de alcachofa asciende a 5.900 hectáreas, con unas pérdidas de producción evaluadas en unos 9 millones de euros, debido al ennegrecimiento de las brácteas exteriores que hacen que los capítulos se deprecien comercialmente.
Según informaron fuentes del Ejecutivo regional, la superficie afectada de tomate asciende a 770 hectáreas, con unas pérdidas de 4,5 millones de euros. Los cultivos bajo malla se han visto perjudicados por la incidencia de enfermedades como la Botrytis.
Respecto a lechuga y habas verdes la superficie afectada asciende a 2.300 hectáreas distribuidas entre las citadas comarcas. Los daños en lechuga se traducen en el deterioro de las hojas exteriores, con la consiguiente disminución de calibre y su depreciación comercial. De las habas se han dañado las vainas existentes y las flores correspondientes a la siguiente cogida.
El director general de Modernización de Explotaciones y Capacitación Agraria, Ángel García Lidón, ha advertido a los agricultores que las elevadas humedades provocadas por las lluvias y la sucesión de días nublados, «podrían motivar en los cultivos hortícolas la aparición de enfermedades criptogamitas, como el mildiu».
Por tal motivo recomienda «intensificar la vigilancia sobre las plantaciones no afectadas por las heladas y realizar alguna aplicación fitosanitaria de carácter preventivo».
Europa Press