El centro de publicaciones del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) ha editado esta semana un estudio sobre identificación de riesgos ambientales para el cultivo del mejillón en Galicia. El libro, impulsado por la Dirección General de Recursos Pesqueros, de la Secretaría General de Pesca Marítima (SGPM), es una de las recomendaciones derivadas de las conclusiones del Libro Blanco de la Acuicultura.
En el estudio, que puede adquirirse en la tienda virtual de publicaciones del MAPA, www.mapya.es, se destaca que el gran desarrollo alcanzado por estos cultivos marinos en Galicia se debe "a las inmejorables condiciones de las rías gallegas para el cultivo del mejillón". Tal es así, que el Atlas de Recursos Vivos del Mar editado por la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación), considera al litoral gallego como "uno de los depósitos de fitoplancton más ricos del mundo".
España es el segundo productor mundial de mejillón, por detrás de China, repartiéndose la producción entre Galicia (más de 250.000 toneladas al año, el 95% del total), Cataluña, Comunidad Valenciana e Islas Baleares. Además, el cultivo del mejillón supone el 82,7% en peso del total de la producción acuícola española, y genera más de 20.000 puestos de trabajo, 13.000 de ellos directos.
El incremento de las concentraciones de nutrientes por afloramiento da lugar a que las rías gallegas, ecosistema integrado en los 1.200 kilómetros de costa de esta comunidad autónoma, acumulen uno de los depósitos de fitoplancton más ricos del planeta. Así, mientras en Galicia son necesarios 17 meses para que el mejillón alcance la talla comercial de 8 centímetros, en el País de Gales o Canadá se necesitan de 5 a 10 años para alcanzar dicho tamaño. El estudio señala que es, por tanto, "requisito imprescindible conservar la calidad de las aguas si se desea aumentar y mejorar la producción de cultivos marinos".
ESTUDIO
El estudio analiza, con todo detalle, el desarrollo agrícola e industrial, las aglomeraciones humanas y el tráfico de embarcaciones en el entorno de las rías gallegas. Factores que suponen la generación de una serie de potenciales riesgos ambientales que pueden afectar en un futuro a la supervivencia, la calidad o el rendimiento de esta explotación. En este sentido, las conclusiones del Libro Blanco de la Acuicultura en España recogen entre sus propuestas de gestión medioambiental, la necesidad de estudiar los riesgos medioambientales que amenazan la acuicultura, de modo que puedan servir para la elaboración de mapas de riesgos en las distintas zonas de producción.
El mejillón es un molusco bivalvo, con valvas semejantes, de bordes lisos con color negro, pardo i azulado, que se distribuye en aguas tropicales y templadas de todo el mundo. De forma natural, vive adherido a rocas o al fondo, en la zona entre mareas, formando extensas poblaciones o bancos. Se trata de una especie resistente que, en condiciones adecuadas, alcanza un rápido crecimiento. Su elevado valor proteico lo hace recomendable para el consumo humano y su cultivo se ha logrado con éxito en diversas partes del mundo.
En Galicia, el mejillón se cultiva en bateas -hay más de 3.400 en las rías- que son viveros flotantes, fondeados, destinados al preengorde y engorde. Constan de un emparrillado de madera de eucalipto que descansa sobre unos flotadores con una superficie máxima autorizada de 550 metros cuadrados. De cada batea cuelga un máximo de 500 cuerdas. A estas cuerdas se adhieren los mejillones.
MAPA