El nuevo reglamento de desarrollo rural: una oportunidad perdida, pese a los avances

Remitido por REDR:

La Red Europea de Desarrollo Rural (ELARD), actualmente presidida por la Red Española de desarrollo Rural (REDR), está participando en los distintos debates sobre el nuevo Reglamento de Desarrollo Rural y su financiación, de la que dependen en gran medida las zonas rurales de España, un 80% del territorio nacional, y más de un 20% de nuestra población.

En este acto, Antonio González, Presidente de ELARD manifestó que “Desde la Red Europea de Desarrollo Rural creemos que en esta negociación no se debe transigir en aspectos de defensa del medio rural y no perder nunca la perspectiva de la solidaridad entre los europeos. Solbes debe ser firme en la defensa de estos criterios para España.”

En los distintos Consejos de Ministros de la UE celebrados para tratar los contenidos del nuevo Reglamento, se han alcanzado acuerdos sobre incorporación de jóvenes; cese de actividad; incorporación de la Directiva de aguas; que las PYMES sean beneficiarias; trato especial a regiones periféricas como Canarias; bienestar animal, o consideración del patrimonio rural en sentido amplio. Cabe destacar la incorporación a la propuesta inicial de un cuarto Eje específico LEADER con una dotación mínima del 7%, que garantiza la persistencia del método en el siguiente periodo 2007-2013 en los 25 países de la UE; lo que desde una visión europea es realmente importante para la continuidad y la difusión de LEADER.

Casi todos los debates actuales están condicionados por el resultado de las negociaciones sobre Perspectivas Financieras 2007-2013, y que afectan a todas las políticas, entre ellas, al Desarrollo Rural. Actualmente, las cuestiones pendientes son:

1.- El gasto mínimo por cada Eje. La propuesta de Reglamento de Desarrollo Rural de la Comisión Europea propone el siguiente reparto por eje:

-Competitividad agraria 15% (el Parlamento Europeo propone el 10%)

-Medio Ambiente 25% (el Parlamento Europeo propone el 20%)

-Diversificación Económica 15% (el Parlamento Europeo propone el 10%)

2.- El porcentaje propuesto para LEADER, de un 7%.

3.- Criterios para definir las zonas desfavorecidas.

4.- Aplicación del enfoque LEADER en los tres Ejes, donde el PP español apoya que sólo sea aplicable al eje 3.

5.- Reserva de eficacia de un 3% para LEADER.

Pese a estas cuestiones, lo fundamental son las perspectivas financieras que van a condicionar la dotación del Reglamento. La Comisión trabaja en un supuesto de aportación de los Estados del 1,14% de sus PIB y, con esta propuesta, los fondos destinados a este Reglamento son 88.700 millones de euros. Las posturas expresadas por Alemania y Francia de no aportar más del 1% del PIB ponen en riesgo esta cantidad. Según las fuentes de REDR y de ELARD, la situación oscilará entre un mínimo del 1,02% y un 1,07%. Supone una reducción de la cuantía inicial.

La situación de España ante estas Perspectivas FINANCIERAS

Actualmente España tiene asignados el 17,64% de los fondos de la UE; lo que supone para Desarrollo Rural 1.277 millones de euros para el año 2006.

Con los nuevos indicadores de reparto para el periodo 2007-2013, a España en la Europa ampliada le correspondería un 10,33% de estos fondos; es decir, aproximadamente 1.220 millones de euros/año a partir del 2007, lo que es comprensible puesto que cambia la situación de algunas regiones que salen de Objetivo 1 y la de otras que hasta ahora estaban en transición. Es el caso de Valencia, Canarias o Castilla y León, que salen de Fondos Estructurales, o las de Asturias, Murcia, Ceuta y Melilla, que sufren el llamado efecto estadístico.

En opinión de ELARD, el nuevo marco para el Desarrollo Rural no será sólo el nuevo Reglamento, sino que éste irá acompañado de las Orientaciones Estratégicas, y del Documento de Implementación, y la dotación de fondos que se le atribuya podría cambiar sensiblemente el futuro de muchas zonas rurales.

Según la Red Europea, ELARD, la estrategia de Lisboa está apareciendo como prioritaria sobre cualquier otra política de la UE, y los objetivos de competitividad, crecimiento, empleo e innovación asumen mayor importancia que los objetivos relacionados con el medio ambiente y la cohesión social. La Comisión Europea percibe el enfoque territorial y el método Leader como un aliado de Lisboa.

La Comisión sigue equiparando a las cooperativas agrarias con cualquier empresa mercantil y las excluye de algunas medidas, por lo que es urgente comunicar la importancia que pueden tener las cooperativas como instrumento de desarrollo rural no solamente para los agricultores sino para los territorios rurales en general.

A esto se une la propuesta de la actual Presidencia de Luxemburgo, que plantea una reducción de los fondos destinados al Objetivo 2 de la Política de Cohesión desde el 18% hasta el 15%. Esto puede afectar muy negativamente a las regiones que salen del Objetivo 1 en el próximo período.

En junio/julio 2005 se aprobarán el Reglamento FEADER y las Orientaciones Estratégicas Europeas para el Desarrollo Rural. Durante los siguientes 6 meses la CE desarrollará los Reglamentos de aplicación y los EEMM desarrollarán sus estrategias de Desarrollo Rural. Estos documentos deben asegurar una planificación estratégica de todas las Políticas que afectan al Desarrollo Rural y no ser simplemente una lista de acciones agrarias.

Los grupos de Desarrollo rural vinculados a ELARD apoyan la propuesta de Reglamento FEADER de la Comisión Europea, aunque la califican de poco ambiciosa. Estiman que los fondos económicos son los mínimos necesarios y, en cualquier caso, insuficientes pero aceptables. Defienden los porcentajes propuestos por la Comisión Europea para los 3 Ejes, en especial el 7% para el Eje 4 LEADER. Asimismo reclaman un enfoque integral en estas políticas y que se vea el método LEADER como un apoyo en el cumplimiento de los acuerdos de Lisboa y su validez para ser aplicados en los demás ejes del Reglamento, reclamando un papel especial para los Grupos de Desarrollo, que han demostrado ser útiles como embrión de los partenariados necesarios para aplicar estas Políticas.

La REDR y ELARD mantienen una postura firme de defensa de los derechos de las zonas rurales europeas y españolas en particular. Según Antonio González “Esta política debe ser entendida desde una concepción de lo rural y lo urbano como complementarias, y en ningún caso contrapuestas., siendo necesario que ésta surge de los propios ciudadanos rurales, y así se evitarían despropósitos como el que supone la aplicación de nuevos criterios para definir las zonas desfavorecidas, cuyo resultado es un disparate, cuando se trasladan estos indicadores a la realidad del mundo rural.”

REDR

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