El secretario de la Unió indicó, así, que «la rentabilidad será menor que el pasado año», y destacó la necesidad de volver a la protección entre países desiguales, «ya que nosotros no podemos competir con Marruecos». En este sentido, explicó que «la calidad y las políticas de diferenciación son fundamentales y, sin embargo, las partidas destinadas a las mismas en los presupuestos de la Generalitat valenciana se han reducido».
Así mismo, manifestó su «preocupación» por la no utilización del contrato homologado, acordado en el seno de Intercitrus.
Por lo que se refiere al sector porcino, Botella denunció que los productores de las comarcas de Castellón «cobran unos cinco o seis céntimos menos por kilo de lo que cobra la lonja de referencia, que es la de Mercolleida».
Según dijo, «como consecuencia de la campaña de Navidad los precios han subido hasta pagarse en la última semana a 1,02 euros/kilo, todavía muy bajos y lejos de los costes de producción, que se estiman en 1,10 euros/kilo», y añadió que «las bajadas de los precios que padecen los ganaderos no se trasladan a los consumidores porque se elevan los márgenes de la distribución, que son los grandes beneficiados de la cadena productiva».
Por otra parte, afirmó que las exportaciones a países terceros «están paralizadas por la fortaleza del euro frente al dólar y la carne procedente de Brasil, EEUU y Canadá se ha hecho con los mercados de Rusia y la zona asiática».
La provincia de Castellón concentra el 58% de las explotaciones de la Comunidad Valenciana, con unas 700 explotaciones y unos 650.000 animales. Representa el sector porcino el 67% del total de la cabaña ganadera de la Comunidad Valenciana y es el segundo, después de los cítricos, con mayor importancia en la producción final agraria, según datos de la Unió.
Europa Press