El objetivo es reducir el riesgo de inicio del fuego y su propagación como incendio forestal, intensificando la protección de los montes y su sostenibilidad, mediante actuaciones de Selvicultura preventiva, lineales y sobre la masa, complementarias a las que se llevan a cabo en la actualidad por parte del MARM y otros Departamentos ministeriales.
El Programa tiene carácter bianual y un coste de 250 millones de euros. En él se contemplan actuaciones sobre 275.000 hectáreas. Incluye actuaciones lineales, mediante las que se establecerán discontinuidades lineales en el perímetro de la masa forestal, o en su interior a lo largo de los caminos, vaguadas y divisorias, como pueden ser el acondicionamiento y mantenimiento de áreas y fajas cortafuegos, fajas auxilies en vías de comunicación, líneas de defensa, o creación y mejora de pastizales.
Por otra parte contempla actuaciones sobre la masa forestal que permitirán diversificar la estructura de la vegetación, introduciendo discontinuidades en aquellos sistemas de alta homogeneidad específica y estructural, evitando superficies muy extensas monoespecíficas, conservando y favoreciendo la mezcla de especies o la presencia de rodales o bosquetes de especies diferentes.
Este tipo de actuaciones incluirá también el resalveo de montes bajos para su transformación en monte alto, compatibilizándolo con el aprovechamiento silvopastoral, así como clareos y claras en repoblaciones y regenerados con espesura excesiva.
En los espacios forestales de la Red Natura 2000, estas acciones se realizarán atendiendo a su compatibilidad con la gestión del espacio correspondiente, mientras que en los terrenos forestales desarbolados, se procederá a realizar labores preventivas en una franja de 100 metros colindantes con las masas arboladas.
El Programa de Prevención de Incendios Forestales favorecerá además la adaptación al cambio climático mediante la mejora de las masas forestales como sumideros que incrementen el potencial paisajístico, productivo y ambiental de los ecosistemas, potenciando también el patrimonio natural y la biodiversdad.
Al mismo tiempo ayudará a mitigar la desertificación, a incrementar la seguridad frente a riesgos ambientales a través de actuaciones de protección y labores preventivas para mejorar el comportamiento de los ecosistemas frente al fuego, incrementando simultáneamente el empleo rural al reconducir mano de obra excedentaria de otros sectores. En este sentido se estima que el Plan bianual permitirá generar 11.000 empleos directos.
MARM