El Secretario de Estado de Medio Rural y Agua participa en el Diálogo Internacional de Alto Nivel

España, que acogió la Octava Conferencia de las Partes de la Convención de las Naciones Unidas de lucha contra la Desertificación (COP8) en Madrid en septiembre del pasado año, ostenta la Presidencia de esta Convención durante el periodo 2008-2009.

El principal resultado de la COP8 fue la aprobación del Plan Estratégico a 10 años para la aplicación eficaz de la Convención, siendo uno de los elementos fundamentales de este Plan obtener la implicación de los responsables políticos en la lucha contra la desertificación.

El diálogo de Bonn, que será presidido por la Ministra alemana de Cooperación Económica y Desarrollo, Heidemarie Wieczorek-Zeul, constituye el primer paso hacia ese objetivo.

Asimismo se plantea la definición de proyectos y actividades que permitan desarrollar el concepto expresado por el Secretario General de las Naciones Unidas, Ban-Ki-Moon en el sentido de que «La Convención de las Naciones Unidas de lucha contra la Desertificación es la herramienta más poderosa del arsenal internacional para enfrentarse a la degradación de tierras». En este sentido, la Convención proporciona una plataforma para la adaptación, mitigación y resiliencia y constituye el objetivo global del diálogo.

Se trata, asimismo de obtener respuestas de los países parte de la Convención para dilucidar como la ejecución de la Estrategia Decenal, aprobada en Madrid, puede contribuir a enfrentar los retos actuales de la comunidad internacional. En particular se contempla la seguridad agrícola y alimentaría y la adaptación al cambio climático.

El Secretario de Estado de Medio Rural y Agua aportará elementos para el desarrollo de la Estrategia en el contexto del medio natural y la agricultura Mediterránea. Además, y basándose en la dilatada experiencia española, tiene previsto contribuir a la definición de proyectos agroambientales y forestales que permitan luchar contra la desertificación y al mismo tiempo constituyan acciones económicamente eficientes para la adaptación y mitigación del cambio climático.

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