Los datos de las exportaciones citrícolas españolas reflejan que hasta el pasado mes de mayo (falta por computar junio, julio y agosto para cerrar la campaña aunque son meses ya de menor actividad comercial) el valor económico de las mismas era de 2.274.395.000 euros por 2.208.698.000 ( + 3%) de la pasada campaña 2006/2007. En toneladas sin embargo el descenso es espectacular, tras pasar de 3.540.546 toneladas exportadas en la campaña anterior a las 3.016.642 que se llevaban exportadas hasta mayo (-15%). La gran diferencia entre volumen económico y número de toneladas exportadas se debe al aumento experimentado en el precio de exportación al pasar de 0,62 euros/kg de media a 0,75 euros/kg en la actual (+ 21%).
Por variedades citrícolas en naranjas hay descenso tanto en miles de euros facturados (-3%) como en toneladas exportadas (-13%), en mandarinas hay un aumento en facturación económica (+ 4%) y un decremento en el volumen exportado (-12 %) y en limones hay un incremento notable en valor económico (+ 18%) y un descenso en las cantidades exportadas (- 31 %).
Josep Botella, Secretario General de LA UNIÓ, afirma que “los datos reflejan la actual situación del sector citrícola valenciano: la parte comercializadora, a pesar de todas sus quejas, sigue ganando dinero con las exportaciones y la parte productora sigue teniendo problemas para vivir de la citricultura porque los precios en el campo no compensan la gran merma de cosecha de esta campaña a punto de finalizar, poniendo de manifiesto que el que está en crisis es el agricultor y no la agricultura”.
En este sentido Botella lamenta que “la Generalitat continúe haciendo políticas que benefician a los exportadores y no esté aplicando medidas que mejoren a la parte más débil de la citricultura valenciana y que es la que realmente está aportando riqueza a la economía valenciana, sin beneficiarse prácticamente nada de ella.”
LA UNIÓ