España también ha apoyado en el Consejo la propuesta de buscar una solución definitiva para resolver el pago de los gastos de transporte y la preparación del producto para su entrega a distribución gratuita, de forma que dichos gastos se financien al 100% con presupuesto comunitario independiente del presupuesto de programas operativos.
Las retiradas para distribución gratuita estaban contempladas en la anterior OCM y según los términos de la actual requieren de la aprobación previa, entre otros aspectos, de las directrices medioambientales que deben ser sometidas a la Comisión. Esta elaboración de las disposiciones nacionales mediante un procedimiento de propuesta y aprobación impide su aprobación, para los Estados Miembros, durante el primer semestre de 2008, por lo que España ha pedido que se habiliten mecanismos que hagan posibles las retiradas de producción desde el comienzo de la aplicación de la OCM.
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