La Conselleria de Medio Ambiente junto con la Universidad de Navarra ha iniciado un trabajo para determinar el origen de la población de Garza real (Ardea cinerea) en el Parque Natural de la Albufera. Este proyecto, que se une otros estudios realizados anteriormente por la propia Conselleria, tiene como objetivo estudiar el código genético de las garzas de la Albufera y compararlo con los datos que se obtengan de otras garzas españolas, ya que podría diferir de otras colonias de garzas existentes en la Península Ibérica. Cuando se tengan los datos definitivos sabremos algo más de nuestras garzas reales, lo que nos ayudará a entender mejor sus desplazamientos migratorios y postreproductores. Diversos aspectos de la biología de esta ardeida están siendo seguidos desde hace varios años por personal de la Oficina de Gestión Técnica del Parque Natural de la Albufera y un grupo de voluntarios del Grupo de Anillamiento Albufera, que lleva a cabo un seguimiento intensivo de la población a lo largo de todo el año. Entre los estudios que se están llevando a cabo destacan las campañas de anillamiento mediante el marcaje de individuos con anillas de lectura a distancia para su posterior seguimiento durante todo el año, lo que permite recuperar ejemplares anillados hace años e incluso identificar a aquellos que no son del parque natural. La Garza Real , un habitante cotidiano de la Albufera. La Garza Real (Ardea cinerea) o Agró Blau es una garza de gran tamaño y tonalidad general gris, que puede ser observada durante todo el año en el Parc Natural de la Albufera. El primer registro como nidificante es relativamente reciente, puesto que data de 1984, cuando un pequeño contingente se asentó en la pinada de la Devesa de El Saler. Desde entonces, la población se ha incrementado significativamente, habiéndose trasladado en su práctica totalidad a las matas de vegetación palustre de la laguna. Allí forma grandes colonias mixtas, junto con otras especies de garzas, sobre el carrizal. El periodo nupcial se inicia muy temprano, de manera que se pueden hallar puestas en fechas tan tempranas como el mes de diciembre. Como invernante, la especie presenta en la Albufera alrededor de 800 ejemplares, mientras que la población nidificante es muy variable, con mínimos algunos años por debajo de las 300 parejas. La progresión de la población reproductora de la Albufera ha sido positiva, de manera que los primeros datos de esta temporada, tras las visitas realizadas a las áreas de cría, arrojan unas cifras provisionales de cerca de 600 parejas, lo que supone un significativo incremento con respecto al año pasado, así como colocar las cifras en la línea de los máximos registrados para la especie en 1997.
GVA