Los organismos modificados genéticamente (OMG), como todas las tecnologías nuevas, son instrumentos que pueden emplearse para el bien o para el mal del mismo modo que pueden utilizarse en beneficio de los más necesitados o ponerse al servicio de grupos específicos", ha afirmado hoy el Director General de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), Jacques Diouf.
"Hay que observar con cautela el despliegue que hace el progreso científico de instrumentos cada vez más poderosos y oportunidades aparentemente ilimitadas, y establecer siguiendo consideraciones éticas cómo deben utilizarse unos y otras. Por ejemplo, los beneficios que derivan de los OMG deberían repartirse de forma más correcta con los países en desarrollo y con los campesinos de escasos recursos. Sobre todo hay que encontrar la manera de asegurar que los beneficios de una mayor producción lleguen a los más pobres y a los afectados por la inseguridad alimentaria", subraya el Director General de la FAO.
Jacques Diouf hizo referencia a dos publicaciones de la FAO -las primeras de una nueva serie dedicada a la ética en la alimentación y en la agricultura- y a un informe de un cuadro independiente de eminentes expertos acerca de las cuestiones y los retos más importantes que afronta la humanidad en nuestros días, entre ellos la necesidad de un sistema equitativo y ético de alimentación y agricultura.
La primera publicación titulada "Cuestiones éticas en la alimentación y en la agricultura" plantea temas de carácter ético relacionados con la misión de la FAO y aborda la colocación en un marco ético de la alimentación y la agricultura.
"En la actualidad las cuestiones éticas son fundamentales en los debates sobre la clase de futuro que la gente quiere ( ) Quizás el problema más importante es la difusa hostilidad contra los hambrientos y los pobres ( ) Un sistema de alimentación y agricultura más equitativo, con bases éticas, debe dar cabida a tres objetivos mundialmente aceptados, cada uno de los cuales lleva aparejadas numerosas proposiciones normativas: aumento del bienestar, protección del ambiente y mejora de la sanidad pública", dice el texto.
El propósito de la segunda publicación, titulada "Organismos modificados genéticamente, consumidores, inocuidad de los alimentos y ambiente" es compartir los conocimientos actuales sobre los productos fabricados genéticamente con los consumidores, incluyendo la inocuidad de los alimentos que consumen, la protección de su salud y la conservación del ambiente.
La publicación quiere revelar y analizar los argumentos a favor y en contra surgidos en el debate sobre los OMG, desde una perspectiva ética, teniendo en cuenta las materias relacionadas con la propiedad de los instrumentos necesarios para producir OMG, las consecuencias potenciales de su empleo y los efectos indeseables que su aplicación podría comportar, tanto en la actualidad como en futuro.
El documento aboga por la interacción e implicación de todos los interesados en el proceso de toma de decisiones relacionado con los OMG . Subraya además que la moderna tecnología biológica, si se desarrolla adecuadamente, puede ofrecer un potencial nuevo y amplio a la seguridad alimentaria. "Sin embargo, no es posible establecer principios generales para los organismos modificados genéticamente, cada aplicación debe analizarse a fondo estudiando caso por caso".
En fecha reciente, la FAO ha establecido un comité interno sobre ética en la alimentación y en la agricultura para facilitar directrices y determinar el alcance de las cuestiones éticas de relieve para su misión, "La FAO afronta ahora las cuestiones éticas de forma más sistemática, y concede mayor visibilidad a la dimensión ética de su acción de manera interdisciplinaria en los diversos campos técnicos", subraya Margret Vidar, experta de la FAO.
La FAO ha dado vida también a un Cuadro independiente de Expertos Eminentes sobre la Etica en la Alimentación y en la Agricultura, para prestar consejo a la Organización y favorecer la toma de conciencia pública de consideraciones éticas ligadas a cuestiones tan vitales como la seguridad alimentaria para las generaciones presentes y futuras y el desarrollo sostenible de los limitados recursos de la tierra.
En su informe, el Cuadro de Expertos Eminentes afirma: "La FAO debe ayudar a los países en desarrollo a incrementar la investigación y el desarrollo relacionados con las tecnologías biológicas socialmente útiles y respetuosas del ambiente, entre ellas – cuando sea apropiado- el posible desarrollo de algunos OMG".
Del grupo forman parte científicos de Etiopía, China, Cuba, Francia, Malasia, Marruecos, Noruega y Estados Unidos, por un período de cuatro años. Su primera reunión se celebró el pasado mes de septiembre y volverán a encontrarse de nuevo durante 2002.
FAO