Las empresas pueden acceder a líneas de ayudas, financiación y subvención y beneficiarse de un favorable tratamiento fiscal.
● La industria cárnica está trabajando en el desarrollo de nuevos productos con bajo contenido en sal y grasa, así como en productos funcionales.
La Confederación de Organizaciones Empresariales del Sector Cárnico de España (CONFECARNE) ha llevado a cabo una Jornada informativa sobre ‘Ayudas e iniciativas de I+D en la industria cárnica’, que ha contado con la participación de representantes de numerosas empresas de toda España, así como de la Administración y de centros tecnológicos. En la primera parte de la Jornada, se han analizado en profundidad tanto las líneas de ayudas a las que pueden acceder las industrias como el tratamiento fiscal de las actividades de investigación, desarrollo e innovación (I+D+i). A continuación, se han tratado en detalle las principales líneas de desarrollo en las que se está trabajando en el sector cárnico, para responder a la preocupación creciente en la sociedad por una alimentación saludable y la prevención de problemas como la obesidad.
Tras la apertura de la Jornada por parte de Miguel Huerta, Cosecretario de CONFECARNE, que destacó la importancia de la investigación, el desarrollo y la innovación para el futuro de la industria cárnica, Carlos Sánchez, del Departamento de Promoción de la Innovación del Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI), presentó a los asistentes las “Actuaciones del CDTI de apoyo a los proyectos de I+D”. En su intervención detalló las posibilidades de financiación, los requisitos que deben reunir las empresas y proyectos, las ayudas para la internacionalización, y adelantó que el nuevo VII Programa Marco para I+D de la Unión Europea, que se está poniendo a punto, contemplará hasta un 75% de ayudas a los proyectos de I+D desarrollados por las empresas.
Por su parte, Fernando Boned, Consultor de la firma GRUPOTEC-ARTICA, analizó los “Instrumentos financieros de apoyo a los proyectos de I+D+i. Tratamiento fiscal. Subcontratación”. Habló de los incentivos fiscales de los que pueden beneficiarse las industrias, de las necesidades de documentar todo el proyecto, y de la importancia de la certificación externa para facilitar la aplicación de las máximas deducciones fiscales.
A continuación, se abordaron distintas iniciativas de I+D en el desarrollo de nuevos productos cárnicos. En primer lugar, José Antonio García Regueiro, del Centro de Tecnología de la Carne del IRTA, habló de los “Productos cárnicos con bajo contenido en sal”, presentando las funciones tecnológicas de la sal en los productos cárnicos. Afirmó que se puede reducir la cantidad de sal, siempre que se haga sin comprometer la calidad tecnológica y sensorial y la seguridad del producto cárnico. Para ello, analizó las posibilidades, medios y estrategias para reducir y sustituir el cloruro sódico e indicó que es posible reducir la sal en porcentajes superiores a los que pide la Estrategia NAOS.
Francisco Jiménez Colmenero, del Instituto del Frío – CSIC, abordó las “Alternativas de formulación de productos cárnicos bajos en grasa”, detallando los requisitos calóricos para los ácidos grasos incluidos en la Estrategia NAOS y afirmando que hay posibilidades para reducir y sustituir las cantidades de grasa en los productos cárnicos transformados, teniendo en cuenta una serie de condicionantes sensoriales, nutricionales, de seguridad, tecnológicos, de estabilidad, legales, de costes y la actitud del consumidor. Para reducir grasa en estos productos las estrategias se pueden aplicar tanto en las materias primas, en los ingredientes no cárnicos, así como mediante la modificación de los procedimientos tecnológicos de fabricación.
Por último, Blanca Viadel, de Ainia Centro Tecnológico, presentó el “Desarrollo de productos cárnicos enriquecidos”, una tendencia comercial creciente en el sector. Para ello, definió las características y utilización de los productos funcionales o enriquecidos, los problemas, la aceptación por parte del consumidor, los posibles beneficios para la salud, etc. Y presentó algunos ingredientes funcionales utilizados en la industria cárnica y productos comercializados bajo este planteamiento.
La Jornada se cerró con una mesa redonda y coloquio, moderados por José Flores, del IATA-CSIC, sobre I+D y el desarrollo de nuevos productos cárnicos.
CONFECARNE es la organización más representativa del sector cárnico, y agrupa a la Asociación de Industrias de la Carne de España (AICE) y la Federació Catalana de Industries de la Carn (FECIC). Cuenta con 1.200 empresas asociadas, que emplean a 43.000 trabajadores. Las compañías asociadas a CONFECARNE reúnen el 71,5% de la producción nacional de elaborados cárnicos, el 77% del jamón curado, más del 90% de la producción nacional de elaborados de cerdo ibérico, el 70% del sacrificio nacional de porcino y el 60% del sacrificio de vacuno. CONFECARNE forma parte de la FIAB y la CEOE, y en el ámbito internacional está integrada en el International Meat Secretariat (IMS), la Organización Profesional de las Industrias Cárnicas de Transformación de la Unión Europea (CLITRAVI) y la Confederación de Industrias Agro-Alimentarias de la Unión Europea (CIAA). Para el desarrollo de sus actividades, CONFECARNE se estructura en distintos grupos que se ocupan de los grandes sectores de la industria cárnica: GRUPO DE LA GRAN EMPRESA CÁRNICA, GRUPO DE MATADEROS DE PORCINO, GRUPO DE MATADEROS DE VACUNO, SECTOR IBÉRICO-IBERAICE y FUNDACIÓN DEL JAMÓN SERRANO, además de grupos de trabajo horizontal: GRUPO DE NUTRICIÓN Y SALUD, GRUPO TÉCNICO Y DE LEGISLACIÓN, GRUPO DE COMERCIO EXTERIOR, GRUPO LABORAL Y DE NEGOCIACIÓN COLECTIVA y GRUPO DE MEDIO AMBIENTE
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