Remitido por Junta de Extremadura:
El sector del olivar ha iniciado los trámites necesarios para conseguir la denominación de origen de la aceituna manzanilla cacereña, una variedad exclusiva del norte de la provincia de Cáceres, donde existen unos 10.000 olivicultores que cultivan 30.000 hectáreas y producen anualmente unos 60 millones de kilos de aceituna de mesa.
El presidente del consejo regulador de la denominación de origen Gata-Hurdes y presidente de la sectorial de aceituna de mesa de la Unión Extremeña de Cooperativas Agrarias (Unexca), Casto Prieto, confirmó en Losar de la Vera (Cáceres) que se han producido varios contactos entre responsables del sector y de la Administración regional para avanzar en la elaboración de la solicitud de registro de esta nueva denominación de origen, que será una de las de mayor componente social de la región dado el elevado número de profesionales a los que afecta.
Prieto explicó que también se ha informado al presidente de la Junta de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, quien ha acogido favorablemente la puesta en marcha de una nueva marca de calidad. Casto Prieto, que intervino en las II Jornadas Técnicas del Olivar, aseguró que la nueva denominación de origen permitirá «mejorar la comercialización de la manzanilla cacereña y defender el producto ante la agresión de otras variedades».
La responsable de Calidad Diferenciada del Servicio de Promoción Comercial de la Dirección General de Comercio de la Junta de Extremadura, Francisca Adame, explicó que el procedimiento para obtener la denominación de origen es largo, aunque en este caso podrá resolverse antes de dos años debido a que la justificación del proyecto y el estudio de la parte productiva ya están hechos al coincidir con los de la Denominación de Origen Gata-Hurdes.
Una vez elaborada la memoria técnica y solicitado el registro, la Junta de Extremadura deberá dar su aprobación oficial y remitirlo al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, y éste, a su vez, a Bruselas, explicó la D.O. Gata-Hurdes en nota de prensa remitida a Europa Press.
Adame consideró que «la nueva denominación de origen contribuirá a mejorar la rentabilidad, concentrará la oferta y será un elemento esencial en la progresiva modernización de las estructuras en el escalafón industrial». También opinó que el mayor esfuerzo hay que realizarlo en la distribución comercial con el fin de garantizar la presencia constante y destacada de los productos acogidos a la denominación.
Según Casto Prieto, una vez que la iniciativa cuenta con el respaldo del Gobierno regional, «le toca mover ficha al sector del olivar». La nueva denominación, que no podrá tener el nombre de manzanilla cacereña por tratarse de una variedad cuyo nombre se encuentra registrado, contará con el respaldo técnico de la de Gata-Hurdes e, incluso, podrán coincidir algunos miembros del consejo regulador. El ámbito geográfico coincidirá prácticamente con el de la denominación del aceite, aunque será ampliado para incluir zonas que no fueron incluidas en ésta, como las de Plasencia y Moraleja.
La manzanilla cacereña es una variedad que se destina en un 80 por ciento a aceituna de mesa y sólo el 20 por ciento restante está orientado a la elaboración de aceite de oliva. En términos económicos, el 90 por ciento de la facturación de esta variedad depende de la aceituna de mesa y el 10 por ciento de su transformación en aceite de oliva.
Las jornadas sobre la aceituna manzanilla cacereña celebradas en Losar de la Vera han sido organizadas por la Confederación de Cooperativas Agrarias de España (CCAE) con la colaboración del consejo regulador de la Denominación de Origen Gata-Hurdes y la Unión Extremeña de Cooperativas Agrarias (Unexca).
Junta Extremadura