“Entre los nuevos datos a nivel de comunidad destacan la vulnerabilidad ante los desastres naturales y la disponibilidad de servicios como carreteras, electricidad, asistencia sanitaria, escuelas, mercados y proveedores de insumos agrícolas, así como la existencia de organizaciones de campesinos”, explicó Hiek Som, responsable del Servicio de Encuestas y de Desarrollo Estadístico de la FAO.
Objetivos de Desarrollo del Milenio
La FAO ha diseñado esta nueva ronda del censo agrícola (denominada ronda 2010) para ayudar a los países a evaluar el progreso hacia los Objetivos de Desarrollo del Milenio de la ONU (ODM) a través de sus programas estadísticos nacionales, según Som.
Por ejemplo, el contar con datos precisos y actualizados ayudará a entender la repercusión de los cambios en el sector agrícola sobre la seguridad alimentaria de las familias. Así se contará con indicadores sobre los pasos realizados para alcanzar el primero de los Objetivos del Milenio: erradicar el hambre y la pobreza extremas.
La información ayudará a los responsables de la planificación a entender mejor los motivos de la escasa asistencia escolar, en especial en las zonas rurales (el segundo de los ODM pretende conseguir la enseñanza primaria universal).
Las cifras sobre el papel de las mujeres en la agricultura y su participación en actividades económicas no agrícolas pueden arrojar luz sobre las pautas sociales y culturales existentes (el tercer ODM pide la igualdad entre géneros y una mayor participación y autonomía de las mujeres).
La información sobre los regadíos, la degradación del suelo, los bosques, el uso de fertilizantes minerales y pesticidas, ayudará a los gobiernos a una mejor vigilancia sobre las cuestiones medioambientales (el ODM número siete se refiere a la gestión sostenible del medio ambiente).
Datos obtenidos por primera vez
Además de la información a nivel de comunidad, el censo incluirá por vez primera elementos como la degradación del suelo, el riego según el tipo de cultivo, métodos y recursos hídricos en el regadío, prácticas y servicios agrícolas, características demográficas y sociales, seguridad alimentaria de las familias, acuicultura y actividades agroforestales.
La nueva ronda del censo agrícola es la novena en un programa decenal iniciado en 1930 y que la FAO retomó a partir de su creación en 1945. Tras analizar la experiencia adquirida, se ha rediseñado para reducir costes y para, al mismo tiempo, permitir que los países obtengan un mayor número de datos.
Las anteriores rondas del censo fueron positivas, según la FAO, pero ahora se intentará paliar los problemas surgidos en diversos países debido al aumento de demanda de información, los elevados costes del censo, el limitado presupuesto nacional para estadísticas y la complejidad de muchos de los elementos incluidos en el censo.
FAO