FAO: Frenar la pesca clandestina

La pesca INDNR abarca una gran variedad de actividades ilícitas, por ejemplo: pescar sin licencia; pescar especies prohibidas; utilizar aparejos de pesca proscritos; no respetar las cuotas de pesca; y no declarar las especies capturadas y el volumen de la captura, o declarar una captura inferior a la realizada.

«Si se suman todas estas actividades ilícitas, vemos que ellas provocan graves consecuencias. En todo el mundo la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada está socavando seriamente el esfuerzo de conservación y gestión sostenible de las poblaciones de peces» declaró Ichiro Nomura, Subdirector General de Pesca de la FAO. «Todos los países responsables deben colaborar para ponerle fin a este tipo de pesca.»

En algunos lugares la captura de especies de valor comercial puede ser superior al 300 por ciento de los niveles permitidos debido a la pesca INDNR, según informes presentados a la FAO por los órganos pesqueros regionales.

Un número cada vez mayor de estos órganos, que corresponden a organizaciones intergubernamentales establecidas por grupos de países de una misma región para supervisar conjuntamente la gestión de las pesquerías comunes, está adoptando una amplia variedad de medidas para combatir la pesca INDNR.

A nivel nacional, los gobiernos también están interviniendo para afrontar este problema.

Con todo, muchos países no sólo siguen esforzándose para que los barcos que llevan su pabellón se comporten con responsabilidad en el extranjero, sino también para eliminar la pesca ilegal en sus aguas nacionales.

Inspección portuaria más rigurosa: una herramienta importante

Además de las inspecciones realizadas por los Estados de pabellón, es decir aquellos que mantienen flotas pesqueras en el extranjero, y los países ribereños donde se realiza la pesca, otro importante eslabón en la cadena de la lucha contra la pesca INDNR, según la FAO, son las medidas que dificultan a los barcos la descarga o el trasbordo de la captura obtenida en forma ilegal.

Estas medidas de control se denominan «medidas del Estado portuario», y básicamente suponen por lo general la inspección de los barcos pesqueros que llegan a los puertos a abastecerse de combustible, comprar provisiones, hacer reparaciones o descargar la pesca.

A menudo, la revisión de los documentos de las embarcaciones, la inspección de los aparejos y de la captura pueden revelar si un barco ha incurrido en pesca INDNR durante su travesía.

«Con frecuencia se atribuye la persistencia de la pesca INDNR a la deficiencia o a la falta de aplicación de disposiciones eficaces por parte de los Estados portuarios -dijo Nomura-, ya que estas medidas pueden ser uno de los medios más eficaces para combatir la pesca ilegal, no declarada y no regulada porque complementan la inspección de los barcos realizada por los Estados con flotas pesqueras.»

Fortalecer la cooperación internacional

La FAO convocó entre el 31 de agosto y el 2 de septiembre a una reunión en su Sede en Roma de sus miembros para reflexionar sobre diversas posibilidades de colaboración entre los países, con el objeto de fortalecer el control ejercido por los Estados portuarios y tomar enérgicas medidas contra la pesca INDNR.

Durante esta reunión, los participantes elaboraron un plan modelo que puede ser aplicado con flexibilidad por los países, los órganos regionales pesqueros y otras entidades en la ejecución de las disposiciones de control portuario.

«Los principios formulados consisten en una lista de ‘mejores prácticas’ en materia de disposiciones de control portuario contra la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada, capaces de ayudar a los países a mejorar los sistemas de inspección nacionales e internacionales destinados a desalentar este tipo de pesca», dijo David Doulman, Oficial superior de pesca de la FAO y experto en pesca INDNR.

Estas directrices establecen que debería exigirse a los barcos pesqueros e industriales que quisieran descargar en un puerto determinado avisar por radio con anticipación y pedir autorización para atracar, identificar la embarcación y proporcionar detalles sobre su carga y actividades pesqueras recientes.

Esta información permitiría a las autoridades sencillamente rechazar a todas las embarcaciones de las que se tenga noticia de haber incurrido en pesca INDNR, salvo si el barco tuviera problemas y necesitara llegar a puerto por motivos de seguridad.

Además, el plan modelo establece que todos los barcos pesqueros a los que se autorizara el acceso al puerto podrían ser objeto de inspección.

Si la inspección demostrara que el barco ha incurrido en pesca INDNR se le negaría el permiso de descargar. Los casos confirmados se incluirían en una lista negra y podrían verse enfrentados a la acción de la justicia.

«Este sistema no representaría un problema para las embarcaciones que pesquen con responsabilidad, cuyos países de abanderamiento vigilen las actividades de sus flotas pesqueras de conformidad con las leyes y las normas internacionales» señaló Doulman. «Se trata de establecer algunos criterios muy básicos de indagación, por ejemplo: ¿la documentación del barco está en orden? o ¿tiene instalados los aparejos indicados? Así podrían señalarse los casos en los que una determinada embarcación hubiera pescado ilegalmente.»

Ayuda de la FAO

Además de producir este modelo de sistema, los participantes en la reciente reunión de la FAO sobre disposiciones portuarias le pidieron a este organismo de las Naciones Unidas que establezca programas de capacitación en los países en desarrollo a fin de ayudarlos a poner en marcha sus programas de inspección.

Esta labor también incluiría un elemento de ayuda para la elaboración de políticas, en el que la FAO ayudaría a los países portuarios a incorporar medidas de control más rigurosas en su legislación nacional.

Se prevé asimismo que la Organización trabaje con grupos de países para ayudarlos a redactar acuerdos multilaterales destinados a establecer normas comunes a nivel regional para las medidas de inspección de los Estados portuarios.

La lucha contra la pesca ilegal e irresponsable recibiría un gran impulso si todos los países de una región determinada se pusieran de acuerdo en los requisitos comunes que deberían cumplir los barcos antes de ingresar en los puertos, y en difundir la información recopilada sobre las embarcaciones que pescan en la región, indicó Doulman.

Se solicitó asimismo a la FAO crear una amplia base de datos de las disposiciones vigentes en los Estados portuarios de todo el mundo, que fueran de utilidad para que los países pudieran redactar sus propias políticas y reglamentos nacionales.

FAO

Deja una respuesta