La paz y la estabilidad económica a largo plazo en Afganistán deben basarse en el restablecimiento de la agricultura productiva, afirma la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) en una declaración que se publica hoy con motivo de una reunión internacional de donantes en Tokyo.
«El camino más corto para la estabilidad nacional pasa por el regreso de la población rural a su campos para producir los alimentos que el país necesita», asegura la FAO, ya que que alrededor del 85 por ciento de la población de Afganistán depende de la agricultura.
La FAO estima que este año se necesitarán 39 millones de dólares para incrementar el acceso a los alimentos en las zonas rurales y urbanas mediante el aumento de la producción alimentaria y la generación de ingresos a través del suministro de insumos básicos como semillas y fertilizantes.
El llamamiento de la FAO forma parte del «Llamamiento de las Naciones Unidas para el Programa de Asistencia Inmediata y de Transición para Afganistán en 2002», lanzado en el curso de la Conferencia Ministerial sobre Afganistán celebrada en Tokyo.
Para sus actividades de emergencia a corto plazo, la FAO solicita 18 millones de dólares destinados a la distribución de semillas y fertilizantes, lotes de verduras para los repatriados, ayuda a la ganadería mediante vacunas y piensos, asistencia de emergencias en caso de ataques de langostas, el establecimiento de una Unidad de Evaluación de la Seguridad Alimentaria y la coordinación de operaciones de emergencia de recuperación agrícola.
«La situación de la seguridad alimentaria de la población rural y urbana es precaria», afirma Anne Bauer, punto focal de la FAO para Afganistán. «La siembra de otoño ha sido gravemente perjudicada por la sequía y las acciones militares. Es muy difícil que los rebaños de las poblaciones nómadas sobrevivan al invierno, debido a la escasez de piensos y a las enfermedades si no se les vacuna a tiempo. Los agricultores desplazados necesitan semillas y fertilizantes para reanudar la agricultura. Hay que prestar atención especial a las familias repatriadas y a las comunidades que las acogen para facilitar un proceso de reintegración tranquilo.
Para las actividades a medio plazo en 2002, la FAO ha solicitado 21 millones de dólares. Estas actividades de desarrollo se centrarán en el restablecimiento de los sistemas de riego, reforestación, multiplicación de semillas, servicios veterinarios, gestión integrada de plagas y la promoción de cultivos de elevado valor para reducir la producción de amapolas.
«Dedicaremos atención especial a la condición de las mujeres», dice Anne Bauer. «Ellas son responsables, por tradición, de la disponibilidad de alimentos, de los ingresos familiares, la nutrición, los cuidados sanitarios y la educación. Además, veinte años de guerra civil han dejado medio millón de hogares sin hombres que trabajen. El punto de partida debe ser individuar las necesidades y los recursos disponibles para las mujeres».
«Por otra parte, si queremos que los agricultores abandonen la producción de opio, será necesario que tengan acceso a cultivos alternativos, al crédito y a los mercados. La lucha contra la producción de amapolas puede ganarse sólamente si conseguimos mejorar el bienestar de los hogares y de la comunidad, especialmente en las zonas rurales».
La FAO ha establecido ya una Unidad de Coordinación de Emergencia en Islamabad. A raíz de su llamamiento de ayuda a primeros de agosto, la FAO recibió 6 millones de dólares de Alemania, Irlanda, Países Bajos, Noruega yEstados Unidos. En estos momentos se está procediendo a la recogida y distribución de semillas para la siembra de primavera así como a la compra de piensos.
El Departamento para el Desarrollo Internacional del Reino Unido ha asignado 2.900.000 dólares a la FAO para un programa agrícola integrado de emergencia y de desarrollo en Afganistán.
En la actualidad, la FAO cuenta con ocho expertos internacionales con base en Islamabad y uno en Mazar-e-Sharif. Aproximadamente, 40 personas de nacionalidad afgana trabajan para la FAO dentro del país. La FAO reabrirá pronto su oficina, de acuerdo con las premisas comunes de las Naciones Unidas en Kabul.
FAO