Remitido por FAO:
Los participantes en una reunión de dos días de duración -que se inaugura en la Sede de la FAO en Roma, copatrocinado por esta organización, El Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo (BERD), el Banco Mundial y la Iniciativa centroeuropea- debatirán la forma de enriquecer la sinergia entre diversos proyectos de inversión de instituciones públicas y privadas activas en la región.
Asisten a la reunión representantes de instituciones internacionales de financiación, organismos de desarrollo, gobiernos donantes y el sector privado, así como de los ministerios de agricultura de los países interesados.
Colaboración
«Una serie de instituciones está dando apoyo al sector agrícola de la región, desde asistencia a los agricultores y financiación a empresas pequeñas y medianas de las zonas rurales, hasta asesoramiento en políticas a los gobiernos», declaró Emmanuel Hidier, economista de la FAO.
Uno de los principales puntos del programa será cómo incrementar al máximo la colaboración entre los sectores público y privado, a fin de que la inversión agrícola de diversas instituciones financieras se complemente y contribuya a mejorar la eficacia en la producción de alimentos.
Integración
Entre los principales temas de debate está la integración vertical en la cadena alimentaria, es decir, la participación de los diversos eslabones de la cadena, desde el productor hasta el consumidor, para garantizar que los productos agrícolas respondan a la demanda y encuentre mercados apropiados. El Banco Mundial organiza un seminario paralelo durante la reunión sobre el tema de la integración.
«Muchos campesinos y empresas de alimentos pequeñas y medianas de Europa central y oriental tienen problemas para comercializar sus productos en los mercados internacionales, y para tener acceso a insumos, financiación y tecnología», explica Laura Tuck, Directora de Desarrollo Ambiental y Social Sostenible para la región de Europa y Asia central, del Banco Mundial, y añade: «La demanda cada vez mayor de calidad e inocuidad de los productos por parte de los países importadores y las grandes empresas minoristas complican todavía más el acceso al mercado.»
Al mismo tiempo, añade Tuck, las inversiones de grandes empresas minoristas y de la agroindustria han producido repercusiones muy positivas en las granjas y en las empresas locales de alimentos de la región.
Hans Christian Jacobsen, Director de Agroindustria del BERD, coincide: «El BERD es el principal inversionista de la agroindustria privada en Europa central y oriental. Tiene 220 proyectos por un total de 3.500 millones de euros. Si bien estas inversiones están sobre todo en los sectores de elaboración y venta minorista de la agroindustria, repercuten hasta el productor. Por ejemplo, algunos proyectos cerveceros en los que participamos han incrementado enormemente la demanda de cebada local. Nuestra función es unir el potencial de la agroindustria local con la inversión, extranjera e interna, para añadir valor a los productos agrícolas y contribuir a la economía rural y nacional.»
«Un aspecto muy importante de este aumento de las inversiones es el desarrollo de la coordinación vertical y el sistema de contratos en la cadena alimentaria. Las repercusiones son importantes, aunque no siempre se entienden con claridad», añade Tuck.
Para subsanar este problema, el Banco Mundial estudió las tendencias recientes y las consecuencias del aumento de las inversiones en coordinación vertical en la cadena alimentaria en la región. Los resultados de este estudio se presentarán y debatirán en el seminario.
Serbia: intervenciones favorables
En la reunión, una mesa redonda se dedicará a debatir el caso de Serbia, donde el sector agrícola representa más del 20% del PIB, y el Gobierno ha reforzado su compromiso con el desarrollo agrícola al triplicar el presupuesto del sector en 2004.
«En Serbia, por ejemplo, se puede observar la forma en que la compleja interacción de los diversos participantes fortalece la integración vertical del sector azucarero. La FAO está asesorando al Gobierno en materia de políticas y, con el Banco Mundial, proporciona asistencia a los campesinos. El BERD está invirtiendo en empresas agroindustriales y da apoyo financiero al Banco Procredit, que a su vez concede créditos a empresas rurales pequeñas y medianas», informa el analista financiero de la FAO, Vlaho Kojakovic.
En la mesa redonda, la Ministra de Agricultura, Silvicultura y Ordenación del Agua, de Serbia, Ivana Dulic Markovic, presentará un panorama general de la nueva estrategia del gobierno para el sector agrícola, y del apoyo de las instituciones financieras y los donantes.
«Se debería dar especial atención al desarrollo integral en la base, así como a la asistencia en materia de políticas y a la creación de capacidad local y nacional. El objetivo de Serbia a largo plazo es incorporarse en la Unión Europea. Para ello, se necesita más asistencia a fin de armonizar las políticas y asesoramiento, y pedimos a la FAO y sus asociados apoyo concertado para nuestras actividades encaminadas a ese objetivo», añade la Ministra.
La reunión está siendo organizada por EastAgri, red de instituciones financieras, incluidos bancos privados, que participa en el mejoramiento de la cartera de inversiones agrícolas y agroindustriales a través de la difusión de información. Patrocinan EastAgri la FAO, el BERD, el Banco Mundial y la Iniciativa centroeuropea, un foro de cooperación política, económica y cultural en el que participan 17 países de Europa central y oriental.
«EastAgri representa una estructura neutral en la que pueden reunirse las diversas instituciones financieras en un diálogo creativo, que permita compartir experiencias y trazar acciones futuras», declaró Tesfai Tecle, Director del Centro de Inversiones de la FAO. «Este tipo de reuniones, al fomentar la asociación y la colaboración en todos los niveles, contribuyen mucho a mejorar la inversión agrícola en la región.»
FAO