Según precisaron las mismas fuentes, esta vendimia se ha caracterizado por una ausencia de lluvias desde la primavera, por lo que al final del ciclo las altas temperaturas del mes de agosto y primeros de septiembre castigaron en exceso los viñedos y llevó a pensar a una reducción de la cosecha frente a la campaña 2008.
No obstante, el cambio de temperaturas y las primeras lluvias, junto con la mayor rusticidad y adaptación de la variedad verdejo, así como el «importante incremento» de la superficie de viñedo, ha llevado a un «nuevo récord de la cosecha de uva» donde el 96 por ciento son de variedades blancas y dentro de éstas, la mayoritaria ha sido la variedad verdejo que, con 47 millones de kilos, representa el 82 por ciento de la uva blanca elaborada por las bodegas.
La D.O. Rueda aseguró que el estado sanitario de la uva ha sido muy bueno debido a la ausencia de lluvias y de humedad evitando la aparición de la botritis o «podredumbre», enfermedad típica de la uva en época de lluvias o mucha humedad. «El grado ha sido el deseado por los enólogos que han podido vendimiar, parcela a parcela, en función de su propio criterio e interés», continuó este marchamo de calidad.
La D.O. destacó asimismo que la vendimia se ha realizado en un 88 por ciento con máquinas de vendimiar, «de manera que este sistema, bien empleado, está siendo uno de los motores en pro de la calidad, pues su rapidez y posibilidad de vendimiar por la noche (ausencia de luz y temperaturas mas frescas), convierten a la D.O. Rueda es una de las zonas más avanzadas en la viticultura española».
Europa Press