En primera lectura, el pleno ha aprobado numerosas enmiendas a la propuesta de reglamento por el que se crea la Autoridad alimentaria europea. En primer lugar, añade la palabra ‘seguridad’ a la denominación de la Autoridad porque ese es el objetivo que se persigue. De esta manera, se denominaría "Autoridad europea de seguridad alimentaria" (AESA). Otras enmiendas se refieren a las funciones, evaluación de riesgos, la transparencia, la composición de la Junta directiva, la financiación y los criterios para la fijación de la sede.
Ubicación geográfica central
En cuanto a la sede, el Parlamento establece que la decidirá el Consejo previa consulta a la Comisión y al Parlamento Europeo. La sede será físicamente independiente de las instituciones comunitarias. Debe cumplir los siguientes criterios: tener una larga tradición en seguridad alimentaria; reforzar la independencia e integridad de la Autoridad; buenas infraestructuras y medios científicos; ser fácilmente accesible, tener una ubicación geográfica central y contar con conexiones de transportes adecuadas y rápidas; permitir que la Autoridad trabaje eficientemente con los servicios de la Comisión; buena relación coste e eficacia; y ofrecer la necesaria infraestructura social para el personal. El pleno rechazó el punto que pretendía vincular la sede al Estado miembro con un menor número de casos pendientes ante el Tribunal de Justicia Europeo.
Funciones
En cuanto a las funciones de la Autoridad, el Parlamento quiere que, además de los ámbitos con una influencia directa sobre la seguridad de los alimentos, se incluyan otros ámbitos que tengan una repercusión en la seguridad alimentaria como el bienestar de los animales pero sólo cuando los alimentos y los piensos puedan ser peligrosos. La higiene alimentaria debe ser asimismo un objetivo de la Autoridad, aparte de la seguridad.
Prohibición de exportaciones
La regulación será de aplicación no sólo a los bienes producidos en la Unión sino también a aquellos importados. Por otro lado, el Parlamento refuerza la prohibición de la exportación de alimentos y piensos nocivos para la salud, que no sólo no deben comercializarse en el seno de la UE sino tampoco exportarse.
Pymes y productos tradicionales
Otra enmienda reconoce el impacto de las Pyme en la diversidad cultural de los alimentos, y aboga por que se tomen medidas apropiadas para garantizar que pueden cumplir las nuevas normas de seguridad. Asimismo, el Parlamento propugna que se tengan en cuenta los métodos de fabricación locales y tradicionales.
Transparencia
Además, el Parlamento refuerza las exigencias de transparencia para la preparación y aplicación de la legislación alimentaria, y exige que, salvo en situaciones de emergencia, se proceda siempre a una consulta abierta y transparente al público.
En cuanto a la Junta directiva, estará compuesta, según señala el pleno, por 12 representantes propuestos por la Comisión después de un proceso abierto de solicitud.
Otras enmiendas consolidan la participación del Parlamento en algunas cuestiones relativas a la Autoridad.
Financiación comunitaria
Respecto a los recursos financieros, el Parlamento señala que la Autoridad estará totalmente financiada por el presupuesto general de la Comunidad y no por tasas en pagos de servicios. Además, considera que los recursos sólo deberían transferirse de la reserva cuando se haya llegado a una solución satisfactoria sobre su sede y su funcionamiento. Asimismo, toma nota de que se trata de una acción nueva cuya financiación no está prevista en el presupuesto actual y señala que la propuesta de la Comisión implicaría una revisión de las perspectivas financieras o una reducción del gasto en otras políticas de la rúbrica 3.
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