El vicepresidente segundo y portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page ha calificado de “irresponsables” a quienes insisten en la necesidad de realizar más trasvases desde la cabecera del Tajo en la situación actual y ha insistido en que el Gobierno regional viene diciendo desde hace tiempo que puede llegar agosto y no haber agua ni para abastecimiento incluso para el Levante, una situación que calificó de “lamentable”.
“Nosotros estamos dispuestos a compartir hasta la última gota de agua, dentro de lo que permite la ley y nunca por debajo de lo que permite”, precisó García-Page, quien aseguró que si desde el Gobierno de España se hubieran atendido las reiteradas peticiones de nuevos trasvases que se han hecho en los últimos seis meses “no habría una sola gota de agua en la cabecera”.
Respecto a la situación actual de la cabecera del Tajo, Emiliano García-Page señaló que es “muy crítica, por no decir casi la más crítica de los últimos años” y recordó que se han vivido situaciones muy malas, como en 1995, aunque subrayó que el problema no está tanto en cómo está la cabecera sino en las previsiones que hay al respecto.
Así dijo que “si nosotros tuviéramos certeza, o al menos la hipótesis verosímil de que cambie la situación del clima y en las próximas semanas se produjera un aluvión de agua, pues sería razonable dormir más tranquilos así, pero es que no son esas las previsiones”.
En este sentido, subrayó que es necesario trabajar con esas dos premisas, la situación actual y las previsiones y señaló que “si yo fuera murciano, no dormiría tranquilo pensando que el agua para mis hijos depende de un pantano casi seco a 300 kilómetros”. “Más vale que en Murcia se pongan a trabajar en serio en una solución alternativa de fondo, creíble y para siempre, que es el mar”, agregó.
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