El consejero de Relaciones Institucionales de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, subrayó ayer en Toledo que en los próximos meses el Gobierno regional va a acelerar un profundo debate en torno al problema del trasvase Tajo-Segura, “una infraestructura que no es eterna y estamos en el principio del final de esta obra”.
El consejero hacía estas declaraciones durante su comparecencia ante los medios de comunicación para informar sobre las iniciativas legislativas que presentará el Gobierno regional en el próximo periodo de sesiones de las Cortes de Castilla-La Mancha.
Emiliano García-Page incidía en que el Gobierno de Castilla-La Mancha, con su presidente a la cabeza, José María Barreda, ha decidido acometer este debate del trasvase Tajo-Segura “a medio y largo plazo y que termine dándole una solución definitiva”.
Asimismo, el consejero reiteró la solidaridad practicada por Castilla-La Mancha y en que el Gobierno autonómico “comprende muy bien las necesidades del Levante”, añadiendo que sin embargo “entendemos también que el Gobierno de España ha puesto en marcha nuevas soluciones a los problemas que se plantean con el agua en el Levante de cara al futuro”.
Por ello, Emiliano García-Page insistió en que desde el Gobierno regional “estamos muy seguros y firmes en nuestra postura, pero no apremiados por la prisa, sabiendo que lo importante es conseguir el objetivo final del trasvase Tajo-Segura, que se abrirá camino como todo lo que tiene la razón de su parte”.
JCCM