Greenpeace ha lanzado una campaña con el objetivo de conseguir el compromiso de los gobiernos de garantizar el suministro de energías renovables a 2.000 millones de personas que viven en países pobres. Estas personas dependen hoy de fuentes de energía inadecuadas –poco eficientes, caras y dañinas para la salud y el medioambiente– con las que apenas logran satisfacer sus necesidades básicas. Esta campaña internacional, que comienza hoy en nuestro país, se extenderá hasta la Cumbre Mundial sobre Desarrollo Sostenible que se celebrará en Johannesburgo, Sudáfrica, desde el 26 de agosto al 4 de septiembre.
La campaña “Elige Energía Positiva” apelará a la colaboración de la sociedad en diversas actividades para favorecer el crecimiento de las energías renovables en todo el mundo, tanto en el mundo desarrollado como en los países empobrecidos, como una de las medidas a adoptar para frenar el cambio climático y contribuir a la erradicación de la pobreza. Greenpeace buscará una amplia participación social mediante el envío de postales, firmas de adhesión a la propuesta que se presentará en la Cumbre de Johannesburgo, participación económica en un proyecto demostrativo de desarrollo sostenible y movilización para reclamar el derecho a conocer la procedencia de la energía consumida y a elegir energía limpia.
El cambio climático está provocado por el uso de combustibles fósiles y los países empobrecidos son, y serán, los que sufran los impactos del cambio climático más intensamente. Esto, unido a su escasez de recursos económicos y su dependencia de combustibles fósiles, les impide salir del círculo vicioso de la pobreza. La solución a estos problemas está en el uso masivo
de las energías renovables y la eficiencia energética tanto en estos países pobres como industrializados.
“Queremos es que los gobiernos de todo el mundo se comprometan en Johannesburgo a impulsar un desarrollo sostenible que cubra las verdaderas necesidades de las personas, en lugar de proporcionar tecnologías energéticas insostenibles para el medio ambiente”, ha declarado Emilio M. Rull, responsable de la campaña “Elige Energía Positiva” de Greenpeace.
El gasto en combustibles fósiles que van a tener que hacer 2.000 millones de personas de las zonas más pobres del planeta será de 540.000 millones de euros durante la próxima década; sin embargo, para cubrir sus necesidades con energías renovables, el coste sería de unos 280.000 millones de euros en el mismo período de tiempo, lo que, además de ser parte de la solución al
cambio climático, impulsaría el desarrollo económico y tecnológico de estos países.
“Durante los próximos 10 años, los gobiernos deben eliminar las ayudas e incentivos que se están dando a las energías negativas, como combustibles fósiles y nucleares, excluida esta última del Protocolo de Kioto, y poner esos recursos a disposición de las energías positivas: renovables y eficiencia”, declaró Emilio M. Rull. “El primer paso a dar es la ratificación del Protocolo de Kioto y su entrada en vigor antes de la Cumbre de Johannesburgo, para empezar a reducir las emisiones de gases de efecto
invernadero”.
Dentro de las actividades que se realizarán en la campaña ‘Elige Energía Positiva’ se encuentra la colaboración de The Body Shop, que presentará la campaña en sus 78 tiendas en España y recogerá firmas a favor de la propuesta que se presentarán en la Cumbre Mundial sobre Desarrollo Sostenible.
Así mismo, Greenpeace está colaborando con diversas Organizaciones No Gubernamentales, entre ellas Ingeniería Sin Fronteras, para identificar proyectos de cooperación para el desarrollo que el Gobierno debería apoyar como parte de una estrategia de cooperación firmemente comprometida con el desarrollo sostenible..
Con la campaña “Elige energía positiva” Greenpeace pide:
· Al Gobierno:
o Que apoye la propuesta, a adoptar en la Cumbre de Johannesburgo, de abastecer con energías renovables a 2.000 millones de personas de las zonas pobres del planeta.
o Que deje de financiar proyectos de energía sucia (negativa) en los países en vías de desarrollo, y que destine esos recursos a financiar proyectos de energía limpia (positiva).
o Que dentro de la Presidencia Española de la UE apoye la demanda de Greenpeace de un marco regulatorio europeo que favorezca a las energías renovables.
o Que ratifique el Protocolo de Kioto para que entre en vigor antes de la Cumbre mundial sobre Desarrollo Sostenible.
· A los ciudadanos:
o Que exijan el derecho a conocer la procedencia de la energía que consumen y que pidan que su suministro de energía proceda de fuentes renovables y cogeneración.
o Que apoyen las demandas de Greenpeace y colaboren en un proyecto de desarrollo sostenible.
Greenpeace