Greenpeace demanda acciones urgentes para evitar la desaparición del atún rojo en el Mediterráneo

20 activistas de Greenpeace procedentes del Rainbow Warrior simularon un “cementerio” de atunes colocando cruces frente a una granja de engorde de atún situada en el Gorguel, en la costa murciana. Los activistas desplegaron una pancarta flotante con el lema “R.I.P. ATÚN ROJO 1996-2006”, haciendo referencia a los 10 años transcurridos desde que se instalaron las primeras granjas de engorde en Espana. Greenpeace reitera asi su demanda de cerrar de inmediato la pesquería de atún rojo y ha reclamado la adopción de medidas urgentes para recuperar la especie(1).

La población de atún rojo del Mediterráneo está en peligro de agotarse debido a la pesca pirata y a una gestión desastrosa. Por eso es urgente poner en marcha un plan de recuperacion que incluya la proteccion de sus zonas de reproducción (2). En 2005, las capturas de atún rojo rondaron las 50.000 toneladas, un 56 % por encima de la cuota de 32.000 toneladas que pueden ser capturadas legalmente. Estos niveles de pesca ilegal, uno de los más altos del mundo, están estrechamente vinculados con la excesiva capacidad de las granjas de atún instaladas en el Mediterráneo. Actualmente el Mediterraneo tiene la capacidad de engordar más de 51.000 toneladas de atún, casi un 60% más que la cuota legal. Solo España puede albergar 12.000, principalmente en granjas instaladas en la región de Murcia (3).

“La extinción comercial del atún rojo en el Mediterráneo está a la vuelta de la esquina”, -afirmó Sebastián Losada, responsable de la campaña de océanos de Greenpeace.- “Un pequeño número de compañías e inversores dedicados al engorde de atún se están quedando con lo que antes era un recurso común compartido por cientos de pescadores que vivían del atún rojo en el Mediterráneo”.

Todos los indicios apuntan que las capturas de la flota atunera han disminuido considerablemente este año. Las capturas artesanales de las almadrabas en el Estrecho de Gibraltar han descendido en 2006 un 85% comparadas con los niveles del año 2000 y la talla media del atún ha bajado desde 220 kg a 120 kg en algunas de ellas.

El mes de noviembre, los países miembros de la Comisión para la Conservación del Atún Atlántico (CICAA) se reúnen para adoptar nuevas medidas de gestión de la pesquería de atún rojo. España y los demás países de la Unión Europea, que en los últimos años han subvencionado generosamente la construcción de buques más modernos para aumentar más y más las capturas de atún, deben apoyar ahora medidas urgentes para recuperar la pesquería.

“El atún rojo está próximo a su extinción comercial y ecológica. Por eso pedimos a los países miembros de la CICAA que este año tomen medidas drásticas que eviten que se repita en el Mediterráneo lo sucedido en el Pacífico Sur y el Atlántico Occidental, donde las capturas de atún rojo se han hundido espectacularmente y no han conseguido recuperarse. Desgraciadamente seguimos sin aprender de nuestros errores”, afirmó Losada.

Cartagena ha sido la última parada de una expedición de tres meses en la que el buque insignia de Greenpeace, el Rainbow Warrior, ha recorrido el Mediterráneo para exponer los problemas ambientales que sufren sus ecosistemas marinos y proponer soluciones a éstos. Ayer Greenpeace presentó junto a la Asociación de Naturalistas del Sureste (ANSE) una propuesta de creación de una red de reservas marinas en las aguas de la Región de Murcia.
— Greenpeace
(1) El informe de Greenpeace “El Estado del Atún Rojo en el Mediterráneo: cómo el engorde de atún y la pesca pirata están acabando con el atún rojo”, analiza el estado de la población de atún rojo en el Mediterráneo

(2) Greenpeace demanda:
– un programa de recuperación del atún rojo a largo plazo basado en el principio de precaución, que incluya una reducción sustancial de la cuota de atún rojo y la protección de las zonas de reproducción de la especie;
– un nuevo tamaño mínimo de captura que se ajuste a la edad de madurez sexual de la especie;
– la expansión del cierre de la pesquería para garantizar un descenso inmediato y controlable del esfuerzo pesquero sobre la población;
– un programa independiente de observadores tanto a bordo de los buques atuneros como en las granjas de engorde de atún que registre y comunique las capturas para asegurar que no se capturan juveniles, que la cuota es respetada y que la información necesaria para gestionar de forma sostenible la pesquería está disponible.

(3) En España existen catorce granjas de engorde de atún con una capacidad de engorde de 11.852 t. España es el principal país productor seguido de Malta (con 9,650 t) y Turquía (con 9.460 t). La cantidad de atún “realmente” controlada por empresas españolas es en realidad aún mayor, ya que éstas cuentan con granjas en otros países como Chipre, Malta, Croacia, Libia y Túnez. Se espera que cada vez más las capturas controladas por las empresas españolas sean engordadas en las granjas de estos terceros países, en los que los costes de producción son menores y que se encuentran más cerca de los caladeros del Mediterráneo Oriental a los que parte de la flota atunera se ha desplazado en los últimos años.

GREENPEACE

Deja una respuesta