En el Segundo Día de Acción Global en Defensa de las Ballenas (1), activistas de Greenpeace de 14 países (2) están reclamando a sus Gobiernos que no toleren los sobornos realizados por el Gobierno de Japón dentro de la Comisión Ballenera Internacional.
Una decena de activistas se encuentran en la puerta del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Pesca – Ministerio que asume la responsabilidad de representar a nuestro país ante la Comisión Ballenera Internacional (CBI) – para demandar que España condene públicamente esta táctica utilizada por el Gobierno japonés para conseguir una mayoría que le permita acabar con la actual moratoria que impide cazar ballenas.
Representantes de Greenpeace han solicitado al Ministro Cañete una reunión para exponer la postura de la organización ecologista frente a la política desarrollada por el Gobierno japonés de cara a la próxima reunión de la CBI, el próximo mes de mayo.
De continuar esta práctica de compra de votos, el Gobierno japonés podría acabar con el resultado de 30 años de trabajo para proteger a las ballenas.
"No podemos permitir que después de tantos esfuerzos, sea el dinero el quedecida si las ballenas se salvan o no" declaró María José Caballero, responsable de la Campaña de Ballenas de Greenpeace. "La caza comercial de ballenas nunca ha sido ni podrá ser sostenible. Nos encontramos ante un momento crucial en el que los Gobiernos deben denunciar la compra de votosy
mostrar que no están dispuestos a vender a las ballenas" añadió.
A pesar de que un funcionario japonés admitió públicamente el año pasado el uso de ayudas pesqueras para comprar el apoyo a la caza de ballenas (3), sólo Nueva Zelanda ha condenado públicamente al Gobierno japonés por estas maniobras. Diez países ya han recibido más de 133 millones de euros en concepto de ayudas para incorporarse a la CBI y votar con Japón (3) Si se permite que continúe la compra de votos, el Gobierno japonés podría conseguir una mayoría en la próxima reunión que tendrá lugar en mayo, e inmediatamente comenzará a debilitar la prohibición actual para capturar ballenas (4).
"Estamos realizando una llamada de atención a todo el Planeta" añadió María José Caballero. "Nuestros compañeros en la Antártida, tras 7 semanas protestando contra la captura de ballenas en esta zona, han sido testigos de primera mano del trabajo de los balleneros, y la compra de votos del Gobierno japonés es tan letal como uno de sus arpones".
En las protestas globales de hoy, Greenpeace demanda que los Gobiernos se unan a Nueva Zelanda y denuncien públicamente al Gobierno japonés por la compra de votos. Con este fin, se recogerán firmas en lugares públicos y frente a embajadas japonesas y se enviarán correos electrónicos y fax para instar a los Ministros de Exteriores y de Pesca a que actúen en este tema.
El día comienza en Nueva Zelanda donde una pantalla de vídeo flotante recorrerá la fachada marítima del centro de Auckland. Finalizará al otro lado del mundo con pantallas de vídeo humanas haciendo llegar su mensaje a los funcionarios gubernamentales.
Notas:
(1) El primer día de acción global en defensa de las ballenas fue el 5 de noviembre de 2001. Ese día, activistas de 17 países pidieron al Gobierno de Japón que no permitiera que la flota ballenera partiera hacia la Antártida a cazar ballenas.
(2) Las actividades tendrán lugar en: Alemania, Australia, Austria, Chile, Dinamarca, España, Estados Unidos, Fiji, Finlandia, Francia, Méjico, Noruega, Nueva Zelanda, y Suecia.
(3) En una entrevista en ABC TV, Australia, coincidiendo con la reunión de la CBI en el 2001, el Sr. Komatsu, un veterano miembro de la delegación japonesa admitió que Japón debía usar "herramientas diplomáticas y compromisos de ayuda al desarrollo para influenciar a los miembros de la Comisión Ballenera Internacional".
(4) La Agencia Pesquera de Japón ahora cuenta con el apoyo de 10 naciones por cuyos votos ha pagado: Antigua y Barbuda, Dominica, Guinea, Granada, San Vicente y las Granadinas, Santa Lucía, San Kitts y Nevis, Islas Salomón, Panamá y Marruecos. Todos excepto Marruecos han votado con Japón en todos los temas. La semana pasada Greenpeace hizo públicos datos que muestran que el Gobierno japonés ha gastado ya más de 350 millones de euros para comprar la vuelta a la caza comercial de ballenas. Sólo en el 2001 gastaron más de 50 millones de euros en ayudas pesqueras concedidas a 6 países. El Primer Ministro de Antigua y Barbudo, Lester Bird, admitió que la contrapartida a este dinero era votar en el mismo sentido que Japón en los temas relacionados con la caza de ballenas.
Greenpeace