El águila real es una especie protegida incluida en el Catálogo Regional de Especies Amenazadas en la categoría de “Vulnerable”. En el censo nacional de parejas reproductoras, realizado en 1990, se estimó que Guadalajara contaba con 56 parejas, cantidad que disminuyó en el censo realizado en 1995, estimándose entonces la población reproductora de águila real en la provincia en 52 parejas. El pasado año se realizó un nuevo censo provincial de la especie contabilizándose un total de 73 parejas.
Al tratarse de una especie muy sensible a las alteraciones del hábitat y a las molestias producidas por las actividades humanas, Medio Ambiente consideró conveniente repetir este censo en el presente ejercicio, con el fin de actualizar la información sobre delimitación de los territorios de nidificación y localización de los nidos, así como obtener los datos que permitieran identificar sus problemas de conservación.
Los trabajos han sido realizados por el personal de Medio Ambiente en Guadalajara y han evidenciado la existencia de las 77 parejas reproductoras, de las que 60 tienen su territorio de nidificación íntegramente en la provincia de Guadalajara, mientras que 17 parejas son compartidas con provincias limítrofes, aunque poseen nidos en nuestra provincia.
Se constata, por tanto, un incremento en el número de parejas censadas en la provincia, lo que viene a ratificar la tendencia de los últimos diez años, que ha sido de un crecimiento de un 20%, 4 parejas más.
El estudio se ha centrado también en investigar la reproducción de estas parejas, y así se han averiguado los resultados de las crías de 40 parejas. Un total de 34 de esas parejas realizaron la puesta y de ellas 32 lograron finalizar la reproducción con éxito, naciendo 40 pollos de los que 37 llegaron a volar.
Estos datos reflejan parámetros reproductores normales, similares a los valores medios para la especie en la Península Ibérica.
Por otra parte, en la elaboración del censo se ha recopilado toda la información posible sobre la ubicación y características de los nidos, lo que ha permitido definir las características típicas de un nido de águila real en Guadalajara, que se correspondería con un nido ubicado en una repisa de un roquedo calizo de medianas dimensiones, de unos 20 metros de altura, situado a unos 1.100 metros sobre el nivel del mar y orientado al norte.
El seguimiento continuado de la población de águilas reales ha permitido identificar los principales problemas que afectan a esta especie en la provincia, lo que facilita la puesta en marcha de actuaciones de conservación adecuadas.
Los principales factores de amenaza para el águila real en Guadalajara son la electrocución en tendidos eléctricos, la degradación de su hábitat por construcción de infraestructuras, la disminución de alimentos y las molestias durante el periodo reproductor motivadas por obras o por el tránsito de vehículos y personas cerca de los nidos, siendo muy escasa la incidencia de expolios o envenenamientos.
Ante estos riesgos, Medio Ambiente ha sustituido los apoyos de tendidos eléctricos de mayor riesgo de electrocución y ha cerrado pistas que discurren próximas a nidos durante el periodo reproductor. Además, se mantiene vigilancia para evitar el expolio.
JCCM