Nota de AVA-Asaja Las bajas temperaturas también han dañado las brotaciones de cítricos en toda la provincia de Valencia pero, dadas las fechas actuales, es imposible calcular las pérdidas, puesto que los daños dependerán de la evolución del arbolado en los próximos meses, según apunta la organización agraria.
Por cultivos son los frutales los más afectados por el temporal de frío, con unos daños acumulados en melocotones, nectarinas, ciruelos y albaricoques que rondan los 40 millones de euros, según estimaciones de AVA. Las comarcas más perjudicadas han sido la Ribera Alta, la Vall d’Albaida, La Costera y la Foia de Bunyol. En estas dos primeras comarcas se estiman daños de hasta el 90% en algunas parcelas. También la brotación del caqui se ha visto dañada, aunque habrá que esperar a la evolución del cultivo.
En cuanto a las hortalizas, cuyos daños se calculan en 4 millones de euros, la patata temprana de L’Horta Nord, la Ribera y Camp de Túria ha sufrido en mayor medida las consecuencias de las heladas. Sin embargo, aunque en menor medida, las bajas temperaturas también han afectado a lechugas y alcachofas, en zonas muy localizadas y sin afectar a grandes extensiones.
Por lo que respecta a los almendros, se constantan los estragos provocados por las heladas, cuyas pérdidas ya cifró AVA en unos 8 millones de euros, con daños que alcanzan el 100% de la cosecha en muchos términos municipales de Utiel-Requena, y, en menor medida, en el Rincón de Ademuz, Alto Turia y Valle de Cofrentes.
Ante esta circunstancia, AVA exige a Agroseguro que amplíe la cobertura en la línea de patata, que actualmente no cubre el riesgo de helada, y que contemple para el seguro de cítricos los daños en brotación-floración, en base a un histórico, tal y como recoge el seguro de frutales desde hace años. Así mismo, insta a la entidad aseguradora a que mejore el seguro del almendro, que si bien contempla el riesgo de helada, cuenta con una baja contratación dada las condiciones de franquicia, mínimo indemnizable y rendimientos.
La organización agraria también solicita celeridad en la peritación de los riesgos cubiertos por el seguro agrario, con indemnizaciones justas, así como que la Administración autonómica sea sensible con los agricultores afectados por siniestros no cubiertos por el seguro y, por tanto, habilite las oportunas ayudas, vía exenciones fiscales o condonaciones del IBI rústico, entre otras, que palien en parte los daños producidos.
AVA