La prohibición de importar aves de corral que no distingue si proceden de un país infectado o no, es contraria a los principios de la Organización Mundial del Comercio (OMC), a las normas de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) y a la recomendación de la propia FAO, según informó el organismo de la ONU en un comunicado.
Al tiempo que las autoridades prohíben las importaciones para prevenir posibles brotes de gripe aviar, la FAO asegura que en algunos casos «la prohibición incluye a los pollos procedentes de cualquier país sin distinción, incluso aquellos que están libres de la gripe aviar y donde nunca se ha registrado un brote del virus H5N1».
Los gobiernos que imponen prohibiciones arbitrarias a las importaciones de aves de corral de países libres de la enfermedad hacen aumentar la vulnerabilidad de los mercados mundiales frente al riesgo de una caída de los precios, según la FAO.
El organismo de la ONU advierte que «las restricciones comerciales para salvaguardar la salud humana y animal deben imponerse tan solo en relación al riesgo existente y ser levantadas de forma inmediata cuando ya no hagan falta».
Por su parte, los países exportadores de aves de corral deben garantizar que cualquier brote de la enfermedad se anuncie con rapidez a sus socios comerciales y se tomen las medidas necesarias para evitar que se propague la enfermedad.
Los mercados se resienten
«La prohibición de importar aves de corral de países libres de la enfermedad incrementa la incertidumbre en el mercado mundial de productos cárnicos, que ya se enfrenta al riesgo potencial de desabastecimiento y alza de precios debido a la restricciones todavía en vigor a la carne de vacuno de Norteamérica a causa del mal de las vacas locas», según la FAO.
Los mercados también se resienten debido a las recientes restricciones a la importación de carne de Brasil, el mayor exportador de carne del mundo, en respuesta a los casos de fiebre aftosa.
La FAO subrayó que la aparición de enfermedades transfronterizas, seguida de la imposición de restricciones, ha tenido un impacto inmediato en el mercado cárnico mundial en el período 2004/2005. Los precios internacionales de la carne, según los índices de la FAO, calculados de acuerdo a una media ponderada, han alcanzado su nivel más alto de los últimos diez años.
Preocupación entre los consumidores
La respuesta de los consumidores frente al riesgo de aparición de la gripe aviar están teniendo ya un efecto significativo en el sector avícola en Europa y otras zonas del mundo. En el continente europeo la reacción ha sido desigual, por ejemplo en Alemania no han variado apenas los hábitos alimentarios, mientras que en Italia el consumo de carne de pollo ha descendido un 40 por ciento.
La FAO recordó a los consumidores que la gripe aviar no es una enfermedad de origen alimentario, y que el virus muere sometido a una temperatura alta durante el normal proceso de cocción. «No hay riesgo de contagio de la gripe aviar por el consumo de carne de pollo o huevos debidamente cocinados».
Al mismo tiempo, la agencia de la ONU urgió al sector de la industria cárnica para que aplique todas las medidas necesarias para prevenir el eventual contagio del virus a los humanos.
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