La Consejería de Agricultura y Pesca de Andalucía está preparando una orden pionera en España, cuyo borrador se encuentra en proceso de discusión con el Ministerio, para fomentar el traslado de las instalaciones ganaderas ubicadas en los cascos urbanos de las poblaciones. La orden contempla ayudas, hasta ahora excluidas por la UE, que podrían auxiliar hasta los 20 millones de pesetas, siempre que atienda a razones de higiene, bienestar de los animales y medio ambiente y no suponga incremento de la capacidad productiva.
Así lo ha anunciado hoy el consejero de Agricultura y Pesca, Paulino Plata, quien ha explicado en comisión parlamentaria las actuaciones que ha realizado la Junta de Andalucía para modernizar la ganadería porcina en la región. Plata, ha manifestado que "el sector del porcino presenta un futuro cambiante, con incertidumbres y nuevas oportunidades que debe saber aprovechar, apostando por diferenciarse en los mercados a través de la calidad".
El sector ibérico es el que ofrece mayores potencialidades de crecimiento ya que es un producto tradicional de la alimentación mediterránea, muy apreciado por el consumidor. Además, es posible aumentar las producciones sin renunciar a la calidad. La normativa que prepara el Ministerio de Agricultura supondrá multiplicar por 4 o 5 la cabaña de ibérico puro en tres años y la orientará hacia sistemas de explotación más extensivos.
Identificación electrónica
En aras de la calidad del producto, la administración andaluza ha firmado con la interprofesional del Cerdo Ibérico (ASICI) un convenio para utilizar las últimas tecnologías con el fin de garantizar la trazabilidad total por medio de la identificación electrónica del animal y sus productos. Se realiza insertando un microchip en la pezuña de los lechones durante sus primeros días de vida, que llega hasta el consumidor final. Este sistema se implantará en 120.000 animales y garantiza la inviolabilidad de los datos y su facilidad de consulta a través de una base de datos pública en Internet que contendrá, como mínimo, la fecha de nacimiento del animal, el tipo racial, la explotación de origen, la explotación de cebo, la fecha e industria de sacrificio y la calidad analítica de los productos.
A través de este convenio, se establece un marco de colaboración entre la Consejería de Agricultura y esta organización interprofesional alimentaria en materia de formación, investigación, transferencia de tecnología, mejora de la calidad, promoción y organización del sector que, durante la campaña 2001-2002 contará con un presupuesto de 984.580 euros (163,8 millones de pesetas), de los que el 30% son subvencionados por la Consejería.
Todas estas actuaciones planean una serie de retos futuros para el sector porcino, con el fin de ganar mercado y que la mayor parte del valor añadido que genera revierta en la comunidad andaluza. Entre otros, destacan la mejora de las estructuras y procesos productivos de las explotaciones, el empleo de métodos de producción más respetuosos con el medio ambiente o el incremento del valor añadido mediante la industrialización.
La cabaña porcina andaluza tiene entre 1,6 y 2 millones de cabezas, lo que representa el 9% de la nacional. Es el sector ganadero de mayor peso, con un valor de 30 millones de euros (50.000 millones de pesetas), el 28% del total de la Producción Final Agraria. La industria cárnica genera 6.000 puestos de trabajo directos y ocupa el primer lugar en facturación en España y el segundo en Andalucía, con unas ventas próximas a los 1.592 millones de euros (265.000 millones de pesetas), un 16,5% del total de España. La industria factura 84,14 millones de euros (14.000 millones de pesetas) y genera 20.800 empleos directos e indirectos.
La Junta