El Centro de Agricultura Ecológica y de Montaña en Plasencia fue el lugar elegido para la celebración de esta actividad, organizada para transferir a los integrantes del sector los resultados de los diferentes estudios sobre cereza llevados a cabo por los investigadores de ambos centros, con el objetivo de que agricultores y empresarios puedan aplicarlos a sus explotaciones para incrementar su rendimiento mediante la I+D+i.
De los proyectos de investigación seleccionados destaca el denominado ‘Aptitud de los Cultivares de Cereza a los nuevos procesos de confección en las centrales frutícolas del Valle del Jerte’, cuya presentación corrió a cargo de los investigadores del Intaex Teresa Hernández y David González.
Este trabajo busca establecer la incidencia que los distintos elementos de la línea de confección de las centrales tienen en los daños mecánicos del fruto, ya que pueden tener importantes consecuencias en la calidad de la cereza durante el almacenamiento y distribución hasta su llegada al consumidor.
Asimismo, este proyecto tiene como objetivo estudiar algunos tratamientos precosecha y postcosecha que disminuyan los problemas de rajado y falta de firmeza.
Otro de los trabajos que se dio a conocer en Plasencia es «Un nuevo producto nutraceútico a base de cereza del Valle del Jerte», coordinado desde la Universidad de Extremadura con la colaboración del Intaex.
Se trata de crear un producto universal, de posible uso generalizado, para cualquier edad y tipo de población como suplemento alimenticio preventivo y terapéutico, frente al insomnio, el estrés oxidativo o problemas relacionados con el estado de ánimo, entre otros, previa selección de las variedades de cereza más idóneas para tal efecto.
Por otro lado, los investigadores del Centro Finca La Orden-Valdesequera, Margarita López y Manuel Serradilla, explicaron las diferentes líneas de investigación sobre cereza que el Centro lleva a cabo en la actualidad, entre las que destacan la selección clonal y sanitaria de variedades autóctonas de cerezo y del patrón reboldo, los estudios de comportamiento agronómico y de calidad de variedades comerciales en el Valle del Jerte, la mejora genética del cerezo, la caracterización nutricional y funcional de las variedades tipo picotas, así como la determinación del estado óptimo de maduración y caracterización molecular y mediante perfiles proteicos a partir del fruto.
Estas jornadas, organizadas por la Denominación de Origen Cereza del Jerte, contaron además con la presencia de técnicos del Servicio de Sanidad Vegetal, del Consejo Regulador y de la Universidad de Extremadura, entre otros.
Europa Press