Para la realización del estudio, los investigadores desarrollaron nuevos métodos matemáticos de predicción del consumo, denominados modelos híbridos. En ellos hay una combinación de predicciones realizadas por métodos habituales de series temporales (secuencia de puntos de datos medidos a intervalos de tiempos sucesivos) y de redes neuronales artificiales (procesamiento automático inspirado en la mente humana).
Una parte de la iniciativa se basó en medir el consumo a través de contador individual y colectivo. Esto último se debe a que en muchas viviendas y bloques de pisos hay instalados contadores colectivos, por lo que el gasto se factura a la comunidad de vecinos y no a cada inquilino individualmente. De la misma manera, se estudió el consumo familiar y se llegó a la conclusión de que no existían diferencias significativas entre un consumo y otro, asegura José María Caridad.
Así, estos científicos del Departamento de Estadística e Investigación operativa de la UCO, han realizado la tarea con el propósito de predecir el consumo de agua en zonas urbanas, concretamente en Córdoba. De esta manera quieren facilitar la planificación de la red de abastecimiento y depuración, la revisión de tarifas y la gestión operativa. Además, según el investigador cordobés, las compañías promueven los contadores individuales.
También han hecho unas predicciones mensuales, desde mediados de un año hasta final del año siguiente (1,5 años), con el propósito de facilitar la estimación de los ingresos que iban a tener las compañías de aguas según las distintas tarifas. Además, estas predicciones permitían simular lo que ocurriría con el consumo si se modificaban las tarifas o los bloques de tarifas respecto a los ingresos totales de la compañía de agua.
Por otra parte, se ensayaron programas comerciales de ordenador que proporcionan predicciones de forma automática, pero fueron desechadas porque la precisión de las predicciones era inferior a la obtenida por el resto de métodos.
Andalucía investiga