Islandia fracasa en su intento de reanudar la caza comercial de Ballenas

Islandia, que en 1992 abandonó la CBI, tenía la intención de unirse nuevamente a este foro internacional pero presentando una objeción a la moratoria sobre la caza comercial de ballenas. Recientemente anunció que sus deseos eran que la citada moratoria acabase lo antes posible y así reiniciar la caza de cetáceos.

Ayer, tras la primera serie de votaciones en el seno de la CBI, la Comisión concluyó que Islandia tendrá durante esta semana únicamente estatus de observador, sin derecho a votar en las decisiones claves (1), como la posible reanudación de la caza comercial de ballenas o el establecimiento de un Santuario Ballenero en el Pacífico Sur.

España, que contrariamente a su actuación en los años anteriores, ha enfriado su postura conservacionista respecto a estos amenazados mamíferos marinos, también rechazó las intenciones de Islandia. "Es un buen comienzo para la delegación española, Greenpeace confía en que el Gobierno español siga en esta línea y finalmente vote hoy a favor de la creación de los dos Santuarios Balleneros" declaró Juan López de Uralde, Director Ejecutivo de Greenpeace.

Antes de las votaciones, los otros dos países que están a favor de la caza de ballenas – Japón y Noruega – intentaron apoyar a Islandia mediante una serie de maniobras legales. Las naciones balleneras estuvieron respaldadas por al menos nueve países, a los que Japón ha estado comprando sus votos a cambio de ayuda internacional (2). Como resultado, las votaciones de estos países fueron casi idénticas a las de Japón.

"Greenpeace siente un gran alivio al ver que los descarados intentos de Islandia para minar la Comisión Ballenera Internacional han sido descubiertos. Pero el hecho de que las votaciones hayan estado tan ajustadas es el resultado directo de la oscura estrategia de Japón y esto es muy grave", declaró María José Caballero, responsable de la campaña de océanos de Greenpeace.

GreenPeace

Deja una respuesta