Las variedades más precoces han percibido las mejores cotizaciones en campo. Los precios medios rondan los 0,70-0,90 €/kg en melocotón, 0,80-0,85 €/kg en nectarina, 0,40-0,70 €/kg en albaricoque y 0,35-0,55 €/kg en ciruela. “La rentabilidad del agricultor, si bien no ha sido extraordinaria, sí es positiva, excepto en aquellos casos en los que las heladas o la virulencia del hongo Monilia arrasaron prácticamente toda la co secha”, matiza el presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado.
Según AVA-ASAJA, varios factores han coincidido en esta campaña para que los agricultores hayan tenido una mayor capacidad negociadora ante los operadores comerciales. Por un lado, la recogida de fruta empezó en mayo con una merma de producción tanto en la Comunitat Valenciana (-30%) como en España (-10%), lo que favoreció un mayor ajuste de la oferta a los mercados. Por otro lado, la campaña en Francia, principal país productor europeo, se retrasó de manera que ya no pudo solaparse con la producción española. Además, añade Aguado, “este año la fruta valenciana ha llegado al consumidor con un sabor y una calidad organoléptica excelentes, lo que ha animado su consumo”.
“El sector debería apostar por las variedades precoces para evitar en el futuro un solapamiento con los mercados internacionales”, concluye el dirigente agrario, “ya que antes del mes de junio las distintas autonomías españolas no tienen porqué hacerse la competencia para atender una demanda suficiente”. El IVIA ya ha puesto a disposición del agricultor variedades precoces resistentes al virus de la sharka y con unas propiedades organolépticas superiores a las actuales. Los agricultores interesados –algunos de ellos ya han realizado los primeros encargos– deben informarse de qué variedades se adaptan mejor al clima de la zona productora. “Estos avances tecnológicos, si se desarrollan en coordinación con todo el sector, pueden ayudar a mejorar la gestión de la campaña y a consolidar, por fin y tras muchos números rojos y campos abandonados, precios justos para el productor”, según Aguado.
AVA-ASAJA