Conocer de primera mano la realidad de las zonas de dehesa peninsulares, de los municipios y comarcas ubicados dentro de estos ecosistemas, su forma de vida, cultura, tradiciones y aprovechamientos económicos y ver en primera persona cómo la Seca del Encinar está destruyendo cientos de encinas y alcornoques a lo largo de hectáreas y hectáreas de territorio, ha sido el objetivo principal de la visita que hoy ha protagonizado una nutrida representación de la Comisión de Medio Ambiente y Agricultura del Congreso de los Diputados.
Dicha representación ha estado compuesta por la presidenta de la Comisión, María Antonia Trujillo, quien desde el principio de los contactos con el Foro Encinal ha demostrado gran interés y preocupación por la constante pérdida de pies de estas especies tan características de nuestro paisaje, así como la creciente falta de rentabilidad de las explotaciones agropecuarias que se enmarcan en perfecta simbiosis dentro de estos ecosistemas.
Trujillo ha estado acompañada por el portavoz de Agricultura, Alejandro Alonso, la vocal Margarita Pérez Herráiz y los portavoces Ceferino Díaz y Marta Estrada (PSOE); el vicepresidente primero José Madero y Aurelio Sánchez Ramos (PP); la portavoz de CIU Conxita Tarruella y el letrado de la Comisión José Manuel Salas.
Guiados por los miembros del Foro Encinal, con su presidente, José Luis García-Palacios, a la cabeza, y por el secretario general de ASAJA-Sevilla, Miguel Afán de Ribera, los diputados han vivido una intensa jornada durante la cual han viajado por este entorno de la provincia de Sevilla, deteniéndose en una finca del término municipal de El Pedroso. Allí, el propietario, Alfonso Vargas, y los miembros del Foro les han explicado en qué consisten los aprovechamientos, fundamentalmente forestales y ganaderos, de estos entornos agrosilvopastoriles, en los que cobra especial relevancia la cría del cerdo ibérico de bellota, que depende absolutamente del fruto de encinas y alcornoques para que su cría y alimentación en extensivo den como resultado los tan apreciados y admirados productos ibéricos.
Por su parte la presidenta de la Comisión de Medio Ambiente y Agricultura del Congreso, María Antonio Trujillo y el resto de miembros de la delegación se han comprometido en la defensa de la dehesa en el Parlamento español y han afirmado que llevarán los problemas de este ecosistema, fundamental para la Península Ibérica a la Comisión Europea, “¡porque en Bruselas deben tomar también conciencia de la importancia capital que tiene la conservación de este ecosistema moldeado por la mano del Hombre!”, como afirmó María Antonia Trujillo.
Pero también han tenido oportunidad de conocer cómo la vida de estos municipios está totalmente marcada por el ecosistema que los rodea. Aspectos como la cultura, las tradiciones, la gastronomía, o el turismo, por citar algunos, dependen de la existencia de este ecosistema gravemente amenazado.
El impacto medioambiental que ciertas afecciones como la Seca del Encinar están teniendo sobre los ejemplares de Quercus de la península es devastador. En zonas concretas, como la provincia de Huelva, se calcula que el número de árboles afectados por ésta enfermedad supera el 1.500.000 ejemplares, con 216.000 hectáreas afectadas de las 240.000 hectáreas que posee la provincia de Huelva. En otras provincias de Andalucía, como Sevilla, Córdoba o Cádiz, aunque la afección es aún menor, la seca avanza a ojos vista, y cada año se ven más árboles y más fincas afectadas. De un modo similar, la enfermedad se está extendiendo por Extremadura, Castilla-León, Castilla-La Mancha y la Comunidad de Madrid y por las regiones portuguesas del Algarbe y el Alentejo.
El Foro Encinal está luchando desde su creación en mayo de 2006 para alcanzar por fin la aprobación de la Ley de la Dehesa en Andalucía, pero también para que se diseñen y aprueben normativas a todos los niveles (autonómico, estatal y europeo), que se fijen de forma exclusiva en los ecosistemas de dehesa como entorno único y exclusivo de la Península Ibérica, y por tanto, que precisan de una protección y defensa ajustada a sus peculiaridades y necesidades medioambientales y socioeconómicas.
ASAJA Sevilla