El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Miguel Arias Cañete, presidió ayer lunes la Conferencia Sectorial de Agricultura y Desarrollo Rural, reunión en la que han participado los Consejeros de Agricultura de las Comunidades Autónomas. Uno de los temas que ha sido objeto de debate es el referido al estudio de las alternativas en la aplicación del Reglamento Horizontal de la reforma de la Política Agrícola Común (PAC).
Una vez aprobados los textos normativos definitivos de la reforma de la PAC, comienza la fase de aplicación, en particular en aquellas disposiciones comunes por las que se instauran determinados regímenes de ayuda a los agricultores, relativas al Reglamento Horizontal. El ministro Arias ha planteado a los Consejeros autonómicos las diferentes posibilidades de aplicación y el calendario para su entrada en vigor. En este sentido se ha acordado la aplicación de la PAC a partir del 1 de enero de 2006.
Existen otros apartados en los que se hace necesario que los Estados miembros elijan entre las diferentes opciones que contempla el Reglamento, como es el caso del régimen de pago único, en cultivos herbáceos, ovino y caprino, y en sector vacuno. En este punto se ha planteado un debate de orientación y continuarán los trabajos en la próxima conferencia sectorial, en el mes de marzo de 2004.
LIBRO BLANCO
Miguel Arias ha expuesto a los Consejeros el contenido del Libro Blanco de la Agricultura y el Desarrollo Rural, documento en el que, por un lado, se exponen y analizan ordenadamente la situación actual y los problemas básicos agrarios y rurales, y por otro, se establecen previsiones sobre la evolución deseable del sector. Asimismo, se formulan una serie de propuestas y recomendaciones necesarias para promover una agricultura española más competitiva, sostenible y multifuncional.
En este contexto, el Libro Blanco se constituye como marco de referencia para facilitar el diseño concertado de políticas agrarias nacionales y autonómicas propias, así como para orientar las decisiones empresariales de los agricultores y del resto de la cadena agroalimentaria.
Para cumplir el objetivo de elaborar un diagnóstico real del sector agrario español y ofrecer orientaciones básicas y estrategias futuras de actuación, ha sido necesaria la contribución activa de todos los agentes implicados en la actividad agraria, ya sean agricultores, ganaderos, agentes sociales, técnicos o responsables en la gestión, habiendo participado más de 2.700 personas en la exposición y debate de 260 ponencias.
El Libro Blanco de la Agricultura y el Desarrollo Rural se ha estructurado en tres grandes bloques, con el propósito facilitar el análisis de los diferentes temas, habiéndose materializado en tres volúmenes temáticamente diferenciados. El primer volumen incluye cuestiones de carácter horizontal que, en mayor o menor medida, son comunes y afectan a todos los sectores productivos y a todos los ámbitos territoriales. Este volumen se divide en cuatro partes diferenciadas, la primera de ellas está destinada a los aspectos socioeconómicos y las estructuras agrarias como factor clave para la modernización de la agricultura, el segundo se dedica a las cuestiones medioambientales, el tercero plantea una visión del medio rural desde una perspectiva global, y finalmente, la cuarta está dedicada a las relaciones institucionales entre las distintas Administraciones agrarias.
En el segundo volumen se aborda una panorámica de las producciones y los mercados agrarios desde una óptica sectorial, donde se analiza la situación y evolución previsible de los subsectores agrícola, ganadero y medios de producción. En este bloque se detalla para cada subsector una pormenorizada información sobre su configuración estructural, productiva, agroindustrial y territorial.
Los enfoques horizontal y sectorial se complementan en los correspondientes análisis territoriales, que son objeto de estudio en un tercer bloque temático, habida cuenta de la diversidad de estructuras, sistemas productivos agrarios y hábitats rurales en España. Finalmente, el Libro Blanco se cierra con unas recomendaciones y directrices generales de carácter institucional.
DISTRIBUCIÓN DE FONDOS
La Conferencia Sectorial ha abordado la distribución territorial de fondos destinados a programas agrícolas y ganaderos, por un valor total de 4.227.739,5 euros.
De este total, se han destinado 528.373 euros para los planes de lucha contra plagas, a distribuir en función de las propuestas realizadas por las Comunidades Autónomas.
Asimismo, se ha acordado el reparto de 2.876.789 euros para la aplicación de los Programas Estatales de erradicación de enfermedades de los animales, así como 298.993 euros, destinados a la concesión de ayudas para la adquisición de animales de reposición de determinadas razas bovinas, ovinas y caprinas autóctonas españolas.
Finalmente, también se ha decidido la concesión de 523.584,59 euros a la Comunidad Autónoma de Cataluña, correspondientes a la cofinanciación de las ayudas para paliar los efectos de los daños producidos por las heladas ocurridas en diciembre de 2001 en las explotaciones olivareras.
PROGRAMA DE CONTROL DE LA CALIDAD
El ministro ha presentado a los Consejeros el programa de Control de la Calidad Alimentaria para el año 2004, orientado a establecer unos objetivos de control de calidad y unos criterios de programación homogéneos en todo el territorio nacional.
Los objetivos de este Plan son:
Control de la adecuación de los productos agroalimentarios y de los medios de producción a las normas que regulan sus características, etiquetado y procedimientos de elaboración. Dicho control incluirá la fabricación, el almacenamiento y, en el caso particular de los medios de producción, la fase de comercialización.
Prevención de las infracciones a la normativa sobre calidad alimentaria.
Seguimiento de los planes de autocontrol que, en su caso, implanten las empresas en materia de calidad alimentaria.
Conocimiento de la problemática de los sectores en materia de calidad alimentaria.
En el Plan se incluyen las propuestas programación por grupo de materias y por Comunidades Autónomas, estando previstas un total de 2.881 actuaciones en vinos y bebidas, 5.260 en productos de origen vegetal, 1.900 en los productos de origen animal, y un total de 469 actuaciones de control en los medios de producción (abonos y piensos).
VIÑEDO Y ARROZ
De acuerdo con el orden del día de la Conferencia Sectorial, también se ha abordado la distribución por Comunidades Autónomas del número mínimo de hectáreas de viñedo a reestructurar, así como la regionalización de la Superficie de Base Nacional de arroz.
Con respecto al viñedo, en virtud del Reglamento regulador de la OCM vitivinícola, la Comisión fija las asignaciones financieras y el número mínimo de hectáreas a realizar por Estado miembro para cada campaña, fijando para España, en la campaña 2003-2004 una asignación financera de 150.958.937 euros y la realización de una superficie mínima de 20.940 hectáreas.
A la vista de la evolución de la superficie realmente realizada en nuestro país en las campañas precedentes y con objeto de evitar posibles penalizaciones por no alcanzar la superficie mínima exigida, se ha considerado oportuno fijar por Comunidades Autónomas el número mínimo de hectáreas a realizar en la presente campaña.
En el caso del arroz, la PAC establece la superficie básica nacional de arroz correspondiente a cada Estado miembro (104.973 hectáreas para España), haciendo el inciso que los Estados miembros podrán subdividir su superficie o superficies básicas con arreglo a criterios objetivos. Con objeto de facilitar la adopción de una decisión, se han debatido los diferentes modelos alternativos para la distribución de la superficie básica española de arroz entre las diferentes Comunidades Autónomas
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