La D.O. Ribera del Júcar, una de las denominaciones de origen más vanguardistas y activas de Castilla-La Mancha y la primera en adaptarse a la Ley de la Viña y el Vino, ha valorado muy positivamente el inicio de la vendimia, con un adelanto entre 7 y 10 días con respecto a la anterior campaña. Ribera del Júcar ha podido contrastar una calidad de uva envidiable, con una sanidad vegetal inmejorable gracias a la labor de los técnicos de Agrupaciones de Sanidad Vegetal (ASV) que emplean técnicas respetuosas con el medio ambiente y con una viticultura equilibrada.
En los últimos controles efectuados en la zona de producción de la D.O. se aprecia una disminución de la producción de en torno al 25 por ciento. Esto se debe, según han constatado los técnicos de Ribera del Júcar, a la intensa sequía que se padece en la región, aunque esta circunstancia, por otro lado, ha provocado que en el período de floración el tamaño de uva sea uniforme y pequeño y se produzcan, por este hecho, vinos de gran calidad.
Apuesta por la calidad
Uno de los objetivos prioritarios de la D.O. Ribera del Júcar es realizar una apuesta clara por la viticultura de calidad. Para ello impulsa la diferenciación de la calidad en campo y realiza podas equilibradas que dan lugar a una uva excelente. Dentro de estas premisas, la cooperativa ‘San Ginés’ de Casas de Benítez, adscrita a Ribera del Júcar, ha implantado un sistema de calidad en campo a través de catas selectivas de uva, lo que contribuye en la selección de los mejores racimos para elaborar sus vinos.
Vinos elegantes, con carácter y con cuerpo
Gracias a esta apuesta por la calidad y a la utilización de las últimas tecnologías para la elaboración de sus vinos, de la D.O. Ribera del Júcar nacen caldos con cuerpo, con carácter y con una elegancia y suavidad que los hacen merecedores de los mejores galardones y de la aprobación más que sobresaliente de los consumidores más exigentes y los críticos más experimentados.
D.O. Ribera del Júcar