El informe sobre el Plan de acción para la eficiencia energética de la Comisión Europea subraya que los Estados miembros deben mejorar la aplicación de la legislación relativa a eficiencia energética. En concreto, el texto señala que muchos países aún no han aplicado «completamente» la Directiva europea sobre la materia, y que sólo cinco de los veintisiete lo hicieron dentro del plazo previsto.
Aparatos y edificios
El Pleno del Parlamento Europeo debatirá este informe sólo una semana después de que el 23 de enero el Presidente de la Comisión, José Manuel Durão Barroso, presentara los planes de esta institución para hacer de Europa «la primera economía de la era de reducción de carbono». Y para lograrlo, habría que mejorar en un veinte por ciento la eficiencia energética y aumentar, también un veinte por ciento, el uso de biofuel; todo ello con el año 2020 como plazo.
El informe redactado por la eurodiputada británica del grupo liberal Fiona Hall examina tanto los equipos y aparatos eléctricos como los edificios. Sobre los primeros, apunta la necesidad de aplicar las nuevas normas de eficiencia energética también a los sistemas de aire acondicionado y a los decodificadores de televisión. También pide que se incluya el alumbrado doméstico «en la lista de categorías de productos prioritarias» y que se retiren gradualmente del mercado las bombillas y equipos menos eficientes.
Ahorrar energía en casa
Además, pequeños gestos como apagar la televisión, bajar el termostato de la calefacción o desenchufar cargadores que no se estén utilizan do también suponen un ahorro energético. Una televisión en ‘stand by’ consume casi la mitad de la energía que utiliza mientras está encendida; se calcula que la décima parte de consumo energético en el ámbito doméstico lo producen aparatos que no están siendo utilizados, pero en los que no se ha presionado el botón de apagado.
Actualmente ya funcionan en la Unión Europea dos sistemas de etiquetado sobre eficiencia energética: la etiqueta comunitaria, aplicable a bombillas, coches y otros aparatos eléctricos, y la etiqueta ecológica, de tipo voluntario. Para la ponente, el sistema europeo de clasificación «logra que la gente tenga una idea del consumo de los aparatos, pero empieza a extenderse la idea de que pueda estar quedándose anticuado», ya que «algunas tecnologías, como la de los frigoríficos, han avanzado mucho».
Incentivos financieros
En cuanto a la eficiencia energética de los edificios, el informe apuesta porque se incluyan en el campo de aplicación de la Directiva todos los inmuebles de nueva construcción, así como los que sean renovados. «Queremos que se incluya a todos los edificios de menos de mil metros cuadrados», explica Hall, que también se muestra partidaria de aplicar incentivos financieros para fomentar la eficiencia energética de los inmuebles.
Tras ser debatido por el Pleno del Parlamento Europeo el miércoles 30 de enero, los eurodiputados someterán hoy el texto a votación.
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