Del mismo modo, la industria cárnica constató un descenso del consumo en las tres especies. Mientras la producción de carne de porcino se redujo un 5%, situándose en 3,3 millones de toneladas, la carne de vacuno y de ovino sufrieron «más intensamente» los efectos de la crisis en sus volúmenes, aunque «defendieron mejor los niveles de precios».
Por canales, el consumo extradoméstico sufrió una caída de más de un 5% en 2009, mientras que el consumo en el hogar mantuvo «a grandes rasgos» los niveles de 2008.
Por lo que respecta al comercio exterior, el sector cárnico exportó en 2009 más de 1,31 millones de toneladas de productos, con unas ventas exteriores de casi 2.532 millones de euros, lo que supone un descenso del 1,5% en toneladas exportadas, y una contracción «significativa» en facturación próxima al 9%, a consecuencia de la «caída rotunda» de las ventas a terceros países.
A pesar de todo, Confecarne señaló que la cifra de negocio alcanzada supone «prácticamente el 2% del PIB total español» y el 14% del PIB de la rama industrial, mientras que el empleo sectorial directo de las empresas del sector, con 88.000 trabajadores, representa en torno al 23% de la ocupación total de la industria alimentaria española.
Europa Press