Durante el período 1999-2002 y a través del Programa de Fomento de la Calidad Agroalimentaria (FOCAL 2000), la industria agroalimentaria de Castilla-La Mancha ha invertido cerca de 987 millones de euros, inversiones para las que ha recibido 284 millones de euros en subvenciones de la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente.
El consejero de Agricultura y Medio Ambiente, Alejandro Alonso, explicó que han sido un total de 1.465 empresas y cooperativas de Castilla-La Mancha las que se han beneficiado de este programa en el período 1999-2002.
Estas 1.465 empresas y cooperativas del sector agroalimentario han invertido 986.865.778 euros y el Gobierno regional las ha subvencionado con un total de 283.916.038 euros.
Alonso destacó que este período 1999-2002 se puede calificar como “el más fructífero” en cuanto a las inversiones realizadas por la industria agroalimentaria regional, y añadió que “nuestra industria agroalimentaria se ha dotado de las mejores y más modernas tecnologías para ofrecer a los consumidores alimentos de gran calidad y seguros”.
El consejero de Agricultura y Medio Ambiente explicó que el vino ha sido la industria agroalimentaria más inversora y ha realizado más de la mitad de la inversión total del sector agroalimentario regional. Así, ha realizado inversiones por 500,6 millones de euros y ha obtenido ayudas por 151,6 millones de euros.
Al sector vinícola, le sigue el cárnico, con 139,4 millones de euros de inversión y una subvención de 38 millones de euros.
El tercer sector es el lácteo, con una inversión de 112,1 millones de euros y unas ayudas por 23,7 millones de euros, y el cuarto sector es el hortofrutícola, con 102,3 millones de euros de inversión y una subvención de 28,6 millones de euros.
Finalmente, el sector del aceite de oliva ha recibido ayudas por 19,5 millones de euros para una inversión de 58 millones de euros.
FOCAL, una apuesta por la calidad
El consejero de Agricultura y Medio Ambiente, Alejandro Alonso, manifestó que “la calidad del sector agroalimentario es una de las prioridades que ha tenido y tiene el Gobierno regional” y añadió que “la puesta en marcha de FOCAL 2000 ha perseguido con éxito este objetivo”.
FOCAL 2000 es un conjunto de programas de ayudas para fomentar la calidad de los alimentos que transforma el sector agroalimentario de Castilla-La Mancha, desde los procesos de fabricación y la tecnología empleada hasta las más modernas técnicas de comercialización.
Según señaló Alonso, FOCAL 2000 responde a la necesidad de ganar cuotas en los segmentos de alto valor añadido en los mercados del vino y del aceite de oliva; pretende afianzar el liderazgo de nuestras empresas de productos cárnicos y del queso manchego.
Asimismo, este programa apoya a los productos acogidos a una denominación de calidad y protege nuestras producciones más tradicionales, como la miel, el azafrán, el ajo, el champiñón o el melón, para que puedan defenderse en un mercado cada vez más competitivo.
La industria agroalimentaria, el motor de la economía regional
El consejero de Agricultura y Medio Ambiente, Alejandro Alonso, señaló que nuestra industria agroalimentaria es el motor de la economía regional, su principal impulsor, y agregó que “la industria agroalimentaria representa el 20% del Valor Añadido Bruto del total de la industria castellano-manchego”.
La industria agroalimentaria regional es muy diversa, está muy diversificada y cuenta con grandes empresas líderes, así como pequeñas cooperativas y sociedades agrarias de transformación.
Unas y otras tienen una gran importancia desde el punto de vista económico y social, ya que generan 18.000 puestos de trabajo fijos y, en muchos casos, son fundamentales para que las poblaciones permanezcan en pequeños municipios y el eje sobre el que gira el desarrollo de numerosas poblaciones rurales.
En total, en nuestra región contamos con 2.000 industrias agroalimentarias, 554 cooperativas y 1.334 sociedades agrarias de transformación, que en conjunto facturan anualmente en torno a los 3.606 millones de euros.
El sector del vino, el sector cárnico, el sector lácteo y el sector del aceite de oliva facturan el 75% del total de la industria agroalimentaria.
JCCM