Dentro de la tónica general de expansión que atraviesa la economía española, el sector agroalimentario español ha mostrado en el año 2000 un comportamiento excelente, registrando avances importantes en sus indicadores de empleo, comercio exterior y precios. Así lo ha manifestado hoy el Ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Miguel Arias, en la inauguración del seminario «La Proyección Exterior de la Empresa Agroalimentaria».
Empleo
El año 2000 apunta ser el año de consolidación del crecimiento de la industria agroalimentaria, que ya se está traduciendo en la creación de empleo. Así, en el cuarto trimestre del año el número de personas ocupadas a alcanzó la cifra de 398.700. Durante este periodo el paro se situó en 40.900 personas, la cifra más baja en la historia del sector. También la tasa de paro es una de las más bajas al situarse en el 9’4 %, es decir, casi cinco puntos por debajo de la tasa general de paro, lo que demuestra la contribución activa del sector industrial alimentario en la lucha contra el desempleo y por la plena ocupación.
Comercio exterior
Destaca en este capítulo la gran capacidad demostrada por la industria agroalimentaria española para posicionarse en los mercados mundiales, frente a la escasa agresividad de épocas precedentes. Los datos de comercio exterior disponibles (hasta noviembre del 2000) sitúan las exportaciones españolas en 2.500.000 millones de pesetas, cifra que apunta a que en el año 2000 podría alcanzarse un nuevo récord. Es especialmente significativa la tasa de cobertura de la balanza comercial, situada de enero a noviembre del pasado año en el 108,8, cuatro puntos por encima de la tasa de 104’7 en 1999. Por otra parte, el saldo entre las importaciones y exportaciones -a falta de los datos de diciembre- alcanzó los 200.400 millones de pesetas, es decir el doble del superávit obtenido en el año anterior.
Precios
El índice de precios de la industria alimentaria se mantuvo en al año 2000 prácticamente estable, al registrar un ligero aumento de sólo el 0’8%. Esta evolución es positiva considerando, no solo que el aumento es siete décimas inferior al de 1999, año en el que subió el 1’5%, sino también que el incremento del conjunto de la industria española fue del 5’5%.
Producción
Por último, la industria alimentaria española registró un ligero descenso de la producción (del 0’87%) en el año 2000, debido a la fuerte bajada del mes de diciembre (de hecho, hasta noviembre, creció el 1%). La caída de la producción del 19’03% registrada en diciembre, obedece principalmente al descenso registrado en las producciones de aceituna y remolacha, al retrasarse a enero -por causa de las lluvias- la recogida de estos productos.También ha contribuido en parte al descenso la crisis del ganado bovino, que ha producido una cierta bajada de la producción industrial cárnica (del 3’3%). El índice anual del sector cárnico se ha situado en el 102’2 es decir, por debajo del 105’6 de 1999, año en el que fue muy alto, pero por encima de los índices de años anteriores a 1999.
GABINETE DE PRENSA