Durante su discurso en la clausura de este encuentro, mostró su deseo de que el futuro texto sea fruto del «consenso social y político». Según dijo, se trata «de un cultivo tan importante para la comunidad andaluza que la finalidad de la Ley debe estar por encima de intereses sectoriales y partidistas, ya que la importancia del olivar no es sólo como motor económico, sino como patrimonio cultura y paisajístico».
Según destacó, uno de los objetivos principales del Gobierno andaluz es que la futura normativa tenga en cuenta «las necesidades de todos los sectores relacionados directamente con este cultivo». Por ello, aprovechó para hacer un llamamiento a las organizaciones que firmaron el VII Acuerdo de Concertación Social para que se impliquen activamente en su elaboración.
En este sentido, recordó que la Consejería ya ha abierto el debate y la reflexión para que todos los agentes implicados aporten sugerencias con vistas a que el futuro texto cuente con todo el respaldo posible.
Gracias a la Ley del Olivar, destacó Aguilera, se van a canalizar las ayudas a los productores a través de la nueva figura del contrato territorial y se beneficiará a todos los tipos de olivar, incluido el tradicional, que cuenta con una incuestionable importancia histórica.
Explicó además la necesidad de poner en marcha herramientas como la nueva normativa para seguir trabajando por un cultivo estratégico en Andalucía, que constituye la primera aportación de renta en más de 300 municipios. Asimismo, añadió que «el Gobierno andaluz quiere liderar en España las políticas relacionadas con el olivar».
Europa Press