En declaraciones, la delegada de Agricultura y Pesca de la Junta en Huelva afirmó que sólo se ha cerrado la zona número ocho de Huelva a la captura de la chirla, por lo que este molusco «se puede coger en otras zonas de la costa onubense» y, por tanto, existe «plena» garantía de consumir y comercializar la chirla en cualquier puerto de Huelva, ya que «los barcos la pueden capturar en cualquier otra zona de producción de Huelva».
«Los ciudadanos pueden consumir chirla porque las lonjas se cuidan mucho de que los barcos la traigan de las zonas donde están permitidas», subrayó. Asimismo, Cortés apuntó que se realizan análisis constantes del molusco en la zona y se levantará la prohibición «cuando haya resultados buenos».
La Delegación de Agricultura y Pesca en Huelva resolvió hoy prohibir la captura y comercialización del longueirón –Solen marginatus– en la zona de producción del litoral onubense correspondiente al río Carreras, y coquina –Donax trunculus– en la zona comprendida entre las desembocaduras de los ríos Guadiana y Carreras, debido a elevados niveles de bacterias coliformes.
Además, continúa cerrada al marisqueo de chirlas –Chamelea gallina– en la zona de producción del litoral onubense correspondiente a Punta Umbría tras haberse detectado que están afectadas por salmonela; el río Carreras para las almejas babosa, fina y japonesa, berberechos y pirulos, debido a la presencia de fitoplancton tóxico; el río Guadiana sólo para el berberecho, por bacterias coliformes; en las marismas del Guadiana-Carreras para las almejas finas por salmonela; la desembocadura del Piedras para el longueirón, por toxinas D.S.P.; y las marismas del Piedras para almejas finas y japonesas, longueirones, navajas y berberechos, por bacterias coliformes y salmonela.
Estas prohibiciones se levantarán cuando se compruebe que los animales se encuentran en óptimas condiciones de salubridad. La Delegación Provincial de Agricultura y Pesca recuerda que el marisqueo sin licencia está prohibido y las sanciones por este incumplimiento pueden oscilar entre los 301 y los 60.000 euros para las personas que capturen tanto coquinas como otros bivalvos sin autorización.
Europa Press