Por provincias la mayor reducción se va a dar en la de Valencia con un 28% pues de una producción de 2.056 toneladas se estima que habrá para esta campaña 1.490 toneladas, seguida de la de Alicante con una bajada del 21% después de tener una producción en 2009 de 2.150 toneladas a las 1.699 toneladas previstas y en la de Castellón se prevé un descenso del 15% tras una producción la pasada campaña de 2.467 toneladas y estimarse ahora 2.092 toneladas. Si se compara la producción de esta campaña con la de los últimos diez años se concluye que la actual es un 15% más baja que la de ese periodo. En un análisis por variedades la reducción en la Largueta podría ser del 44%, del 17% en la Marcona y del 10% en la Comuna.
En cuanto a los precios percibidos por los productores la caída también va en progresión año tras año. De la pasada campaña a la anterior la diferencia es de un 12% y si se compara con la media de los últimos cinco años ésta sube al 33%, una auténtica ruina para el agricultor que ve como la rentabilidad del cultivo desciende de forma alarmante.
Los datos estadísticos indican que la superficie cultivada de almendros en la Comunitat Valenciana durante esta campaña puede oscilar las 60.000 hectáreas, a pesar de que la Conselleria de Agricultura la sitúa de forma desfasada aún en 110.000 hectáreas. En el transcurso de los últimos cinco años se han perdido casi 7.000 hectáreas de cultivo si se tienen en cuenta los datos reales y no los oficiales.
La organización agraria señala que a pesar de los descensos de cosecha, de la desaparición de hectáreas de cultivo, el precio que perciben los productores de almendra de la Comunitat Valenciana sigue a la baja en gran parte por las masivas importaciones procedentes de otros países, fundamentalmente de EEUU, que hunden el mercado de nuestras almendras autóctonas que además tienen una calidad superior.
La Unió