El IPI creció un 5,9 por ciento en los cuatro primeros meses del año 20 jun. 00. Según los datos que acaba de publicar el INE, el Índice de Producción Industrial (IPI) registró en el pasado abril un crecimiento del 0,1% sobre el mismo mes del año pasado, tasa que se eleva hasta el 4,9% al corregir los efectos del calendario laboral. Esta diferencia entre el dato original y el corregido se debe a la incidencia de la Semana Santa, que en 1999 comenzó en marzo mientras que en el presente año se ha situado en abril, con la consiguiente disminución de horas de trabajo. Desglosando el IPI por destino económico de los bienes, el incremento más elevado en abril, con datos corregidos, correspondió al grupo de bienes intermedios (7,8%), seguido por el de bienes de equipo (3,3%) y, en último término, por el de bienes de consumo (1,5%). Se mantiene, por lo tanto, el comportamiento expansivo de la producción de bienes intermedios lo que dada la naturaleza anticipada de este grupo, refuerza las perspectivas favorables para el conjunto de la producción industrial en los próximos meses. En los cuatro primeros meses del año el IPI ha aumentado un 6,4% con datos originales y un 5,9% con series corregidas de calendario. El grupo de bienes intermedios ha sido también el de mayor crecimiento en este período (8,9% con datos corregidos), seguido por el de equipo (6,8%) y consumo (1,8%). Hay que señalar que el débil aumento en este último grupo se explica, en parte, por la negativa incidencia de la caída de la producción de aceite de oliva en los primeros meses del presente ejercicio. Desglosando el IPI por ramas de actividad, destacan, en el promedio del período enero-abril, los intensos crecimientos registrados en las de «producción y primera transformación de metales», «madera, corcho y muebles de madera» y «producción de energía eléctrica y fabricación de gas». En el extremo opuesto, las mayores caídas corresponden a la «construcción de máquinas de oficinas y ordenadores», «fabricación de instrumentos de precisión, óptica y similares» y «construcción naval». En síntesis, la producción industrial mantiene la tendencia alcista que ha caracterizado su evolución en los últimos meses. Este comportamiento se explica por el dinamismo de la demanda interna y por la mejora progresiva de las exportaciones, de la que se está beneficiando, en particular, el sector industrial. Las perspectivas para los próximos meses siguen siendo muy favorables teniendo en cuenta, entre otros factores, el buen comportamiento del grupo de bienes intermedios y la esperada intensificación del ritmo de aumento de las exportaciones.
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