En declaraciones a los medios a su llegada a la reunión, Espinosa lamentó que las medidas propuestas en el informe «no solucionan» las dificultades del sector y, además, corren «a cargo» de los Estados miembros. Por ello, insistió en que hay «muchas cosas» que se pueden hacer «en el ámbito europeo», habida cuenta de que se trata de una crisis que afecta «en mayor o menor medida» a todos los Estados miembros.
Tanto desde la Comisión Europea como desde la presidencia de turno de la UE, que este semestre ocupa Suecia, se ha recordado que las acciones que se adopten para sostener el sector deben «respetar» lo fijado por la política agraria común (PAC).
Preguntada por esta cuestión, la ministra española aclaró que «no hablamos de cambiar el chequeo de la PAC», sino que para activar ciertos mecanismos sí sería necesario «variar algunas condiciones (del reglamento) para que no sea tan rígido» y permitir «medidas temporales» para después «volver» a lo que marca la PAC.
En concreto, Espinosa abogó por una mayor «flexibilidad» en el llamado artículo 68 que permite a los Estados miembros reconducir parte de los fondos de desarrollo rural a sectores en crisis. Esta posibilidad tiene un «tope» del 3,5% que, según explicó Espinosa, ya ha sido utilizado por casi todos los países de la UE, por lo que sería necesario que Bruselas «flexibilizara» dicho porcentaje y aportara «ella misma dinero».
La titular de Medio Rural y Marino también admitió que la cuestión de las cuotas de producción «no está afectando» y pidió que el debate se centre en otras medidas de actuación «inmediata». Es más «sensato» dejar las discusiones sobre la eliminación de las cuotas para un momento «sin contexto de crisis».
Europa Press