La UNIÓ-COAG ha exigido al gobierno español que denuncie a Francia de forma urgente ante el Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas al considerar que el pacto realizado entre las organizaciones agrarias y la gran distribución gala vulnera las reglas comunitarias de la unidad de mercado y la libre competencia.
El secretario general de LA UNIÓ-COAG, Joan Brusca, señala que "el pacto realizado en Francia es más propio de actitudes mafiosas que de las de unos legítimos representantes de los agricultores o distribuidores y que por tanto debe ser inmediatamente roto desde las instancias políticas españolas, francesas y europeas".
Joan Brusca dice que "la excusa de los inferiores costes de producción en Francia no tiene demasiado sentido por cuanto progresivamente se van igualando y además también podríamos hacer nosotros lo mismo con la fruta que nos viene de terceros países donde la diferencia de costes sí que es brutal y encima se trabaja en condiciones de dumping social".
Brusca afirma que "la crisis de la fruta de verano es generalizada en todos los países y no hay más que ver las pérdidas ocasionadas en esta campaña en la Comunidad Valenciana, valoradas por nuestra organización en más de 46 millones de euros".
"Es indignante para los productores valencianos en una campaña como la actual, en la que han tenido tantas pérdidas, comprobar como en el país vecino, que si no me equivoco forma parte de la Unión Europea, se atorgue unilateralmente la potestad de vetar nuestra fruta sin que nadie ponga coto ante semejante barbaridad", finaliza el secretario general de LA UNIÓ-COAG, Joan Brusca.
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