El sector de la agricultura ecológica ve con entusiasmo los datos de la superficie destinada a producción ecológica en la Comunitat Valenciana, que ha registrado un aumento de un 46,12%, y ha pasado de tener 38.754 hectáreas de cultivo en 2009 a 56.628 en 2010, según datos facilitados por el Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino. Este dato de superficie sitúa a la Comunitat Valenciana como la séptima autonomía en producción ecológica detrás de Andalucía, Castilla-La Mancha, Extremadura, Catalunya, Aragón y Murcia.
Este aumento se debe principalmente a la crisis de precios que padece actualmente el sector agrícola convencional valenciano, sobre todo el citrícola, que ha provocado que muchos agricultores hayan transformado sus producciones al modelo ecológico para mantener sus rentas y, por otra parte, a la incorporación de jóvenes al campo y en concreto al sector ecológico como modelo de explotación para llevar a cabo su actividad.
Para el responsable del sector ecológico de LA UNIÓ, Enric Navarro, “en este sentido se observan cambios en los modelos de comercialización de productos ecológicos, reforzando la transformación propia de la venta de los productos”.
LA UNIÓ hace un análisis positivo de los datos publicados por el Ministerio pero indica que en la Comunitat Valenciana en el sector de la agricultura ecológica todavía existen algunos obstáculos que le impiden crecer a mejor ritmo y se favorezca la transformación por parte del productor y la venta local y directa. En este sentido, el precio que percibe un citricultor ecológico por sus productos es el mismo que el que percibía hace 5 años un citricultor convencional; además, los titulares de explotaciones ecológicas familiares que quieren hacer venta directa se encuentran con que no existen industrias transformadoras de productos ecológicos, con lo que acaban por vender su producción como convencional.
Para Enric Navarro, “estamos ante un avance en la producción ecológica, pero hay que mejorar las condiciones del sector, por eso es importante que la Conselleria de Agricultura, que no ha destinado ninguna subvención al sector en los últimos tiempos, propicie una Ley de Producto Artesano, que beneficie a los productores ecológicos familiares, porque la normativa que existe actualmente solo beneficia a las estructuras de latifundio”.
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