En estos momentos ya ha comenzado el proceso de inundación de las 15.000 hectáreas de arroz cultivadas en la principal zona productora como es la del parque natural de la Albufera. La inundación se realiza sin problemas y la entrada de agua llena las parcelas con rapidez.
Con las buenas perspectivas de riegos y que no habrá ni restricciones ni rebombeo de agua, LA UNIÓ prevé que la producción y calidad sea óptima, tal y como sucedió el año anterior. La única excepción a la normalidad se encuentra en el margen izquierdo del rio en Cullera donde las obras en el Cano, han retrasado un poco la inundación de esas parcelas. LA UNIÓ espera que los precios del arroz sean superiores a los del pasado año para ayudar a cubrir los costes de producción y el correspondiente beneficio de continuar con un cultivo imprescindible para el mantenimiento del parque natural.
Los costes de producción se han visto aumentados por la retirada de productos fitosanitarios que usaban los arroceros y por los daños no compensados de la avifauna. En este sentido, los productores de arroz muestran su preocupación por las restricciones fitosanitarias ya en vigor y las que se impondrán en aplicación de la nueva regulación aprobada por la Comisión Europea que han encarecido los costes, en tanto en cuanto que no existen productos alternativos adecuados y eficaces que sustituyan a los eliminados.
Otro gran problema para los arroceros es de los graves daños que causa la avifauna en los arrozales, para los cuales la Conselleria de Medio Ambiente ha dejado inexplicablemente de otorgar indemnizaciones. Durante los días de siembra los ataques de aves se incrementan y por ejemplo el pasado año, sólo en los términos municipales de Silla y Catarroja y durante la primera semana de siembra, LA UNIÓ ya cuantificó los daños por la avifauna en 150.000 euros.
La Conselleria de Medio Ambiente argumenta que el motivo para la desaparición de estas ayudas se encuentra en la inclusión de los daños por avifauna en el seguro del arroz. Sin embargo, LA UNIÓ considera que los daños que cubre el seguro no son suficientes y además se exige una franquicia elevada y un porcentaje de daños muy alto que debe demostrar el arrocero. LA UNIÓ señala así mismo que año tras año el número de aves prolifera en los alrededores del parque natural y la mayoría de las que eran pasajeras se han convertido ya en autóctonas.
La Unió